Hasta el momento, 22 departamentos están en llamas, 20 vidas humanas se perdieron, además de innumerables e irreparables daños en la flora y fauna del país. Como se recuerda, el 18 de setiembre, el Gobierno de Dina Boluarte declaró el estado de emergencia para los departamentos de Amazonas, San Martín y Ucayali, pese a que el reporte de incrementos de incendios forestales en Perú ocurrió entre fines de agosto a inicios de setiembre.
La tardía acción del Estado ocurre en medio de comentarios indignantes del premier, Gustavo Adrianzén, como que "no se ha considerado una declaratoria porque está todo controlado" y que "Dina Boluarte no apagará los incendios de manera manual", pese del pedido de auxilio de las autoridades regionales.
Por ello, La República conversó con Fidel Asenjo Pérez, coordinador regional de la Mesa de Concertación de la Lucha contra la Pobreza de Amazonas, para que nos informe la situación actual por la que vienen pasando. Tras la entrevista, se concluyó que el estado de emergencia en la región fue un saludo a la bandera.
Zona arqueológica en Lámud. Foto: Municipalidad de Luya-Lámud/Facebook
Asenjo manifestó que los incendios en Amazonas comenzaron a aparecer en Luya y Lámud entre los días 7 y 8 setiembre y 3 días después la sociedad civil se pronunció para que el Gobierno Regional declare la emergencia. El Gobierno Regional de Amazonas lo solicitó al Gobierno Central el 13; sin embargo, la declaratoria se concretó 5 días después. Para ello, tuvo que pasar un total de 10 días, desde el primer reporte.
"Aquí vemos que no hay articulación, ni regional, ni local. Hay una débil articulación y eso es una debilidad del país, no se articula, no existe un liderazgo sólido ante una emergencia, porque nos estamos incendiando, se está prendiendo el país", sostuvo Asenjo Pérez.
Manifestó que la visita de Boluarte a Amazonas, en la que humilló a un periodista de la región, fue lamentable e incoherente, tratándose de una grave situación de emergencia.
"Me parece lamentable. Nosotros estábamos en la zona afectada, por eso las respuestas son emotivas, porque están cargadas de sentimiento, y creo que esa contestación al periodista, de 'tus lágrimas no me interesan', no fue la más coherente", sostuvo.
Asimismo, recordó que ese día en Florida (Pomacochas) llegó un helicóptero con agua, que hizo dos horas de vueltas, una en la mañana y otra en la tarde. Sin embargo, se volvió a prender, por el viento y la temperatura. "No fue suficiente la ayuda", comentó.
Posteriormente, los helicópteros volvieron a la región, en los incendios de Hualla Belén y Lámud, pero ya cuando todo está calcinado. "Entonces la respuesta es lenta, casi nada, porque es una emergencia. Si llegamos cuando todo se calcina, ¿qué sentido tiene?", indicó para luego agregar que la lluvia ha contribuido en apagar algunos focos de incendios.
Asenjo manifestó que si bien no hay datos oficiales, se estima que son más de 30.000 hectáreas afectadas en Amazonas por los incendios forestales. De otro lado, confirmó 2 pérdidas humanas en Amazonas, quienes murieron por las llamas de los incendios forestales en Jalca Grande y en Cajaruro.
En Amazonas, si bien el Ministerio de Cultura indicó que sitios del Patrimonio Mundial no fueron afectados por los incendios forestales. Sin embargo, reconoce que el Sitio Arqueológico Pueblo de los Muertos ha quedado realmente afectada y que también están afectadas Ayachaqui y Léngate.
En las últimas horas, también se ha confirmado que Lámud ha perdido 9.400 hectáreas de cobertura natural (árboles y pastizales), lo que equivale al 82% de las hectáreas perdidas por los incendios forestales en la región Amazonas, por lo que Asenjo considera que "es uno de los incendios históricos en Amazonas".
"Lámud es considerando una zona turística y una ciudad arqueológica riquísima, como el Sitio Arqueológico Pueblo de los Muertos, pero una parte de la estructura está calcinada. Si bien no ha llegado a Kuélap, ha estado muy cerca. También sabemos que hubo un incendio en la cabecera de Gocta, ahí hay colchones hídricos, donde se ha logrado mitigar el incendio, pero también hay otras zonas importantísimas en Amazonas, como Huaylla Belen, donde ocurrió el último incendio el viernes, se prendió todo", agregó.
Muchos ciudadanos a nivel nacional vienen denunciando la inacción del Gobierno para exterminar los focos de incendios, debido a que han pasado varias semanas y el fuego no se logra controlar en varias zonas del país. Esta situación no es ajena en Amazonas. Asenjo observó que el primer obstáculo que se tiene que sobrepasar es la articulación de los entes del Gobierno Central con la sociedad civil.
"Hace una hora el Gobierno Regional de Amazonas se ha reunido, y ahí vemos lo siguiente: la falta de articulación. Con la sociedad civil se deben tomar acciones en conjunto. Si no hacemos acciones conjuntas, no podemos ser efectivos frente a la situación", sostuvo.
Incendios forestales en Luya, Amazonas. Foto: Municipalidad de Luya-Lámud/Facebook
En Amazonas, se ha expuesto que la Compañía de Bomberos Voluntarios N.º 101 tiene 54 bomberos y de ellos solo 10 tienen indumentaria deficiente para pagar incendios. Es por eso que la gente ha salido a apagar los incendios con ramas. Lo que demuestra que no cuentan con un plan de acción o un programa de ayuda ante estos siniestros.
Al respecto, comentó que los bomberos hacen actividades, como polladas, para comprar sus equipos, mientras tanto se la resuelven como pueden antes este tipo de emergencias.
"No tienen mangueras, tienen un vehículo del 2004 con capacidad para 1000 galones de agua. Llegan con el zapato roto. Es lamentable la situación de bomberos, quienes van a apagar los incendios en esas mismas condiciones. Ellos son los primeros que salen a poner el pecho cuando ocurre estas situaciones, exponen su vida, y encima son voluntarios", aseveró Asenjo.
"Por eso, la sociedad civil va a apagar los fuegos con ramas, con picos, con palanas, ¿cómo pueden resolver esa situación de gran magnitud así? Entonces, eso nos da una noción que estamos jalados en cuanto a prevención de incendios", agregó.
Manifestó que durante una emergencia un bombero le relató que "no hay una verdadera intención de apagar los incendios". "Hay negligencia, indolencia, como no me toca a mí. Hay un canal de respuesta, se está incendiando y todos corremos. Entonces, la ayuda ha sido demasiada lenta", sostuvo.
Asenjo manifestó que ya no hace falta voluntarios, sino brigadas. "La sociedad civil es la que se ha puesto el hombro, y yo felicito que aún existe el lado humano y la solidaridad, pero hoy nos damos cuenta de que nosotros no estamos preparados para esto porque hay que formar brigadas", dijo.
En ese sentido, manifestó que la organización Yunkawasi y la Universidad Rodríguez de Mendoza viene capacitando a la sociedad civil para este tipo de eventos y otros que próximamente vendrán.
"Ahora viene una megalluvia, nos vamos a encontrar nuevamente en la emergencia y no estamos preparados. Hemos tenido dos años de verano en Amazonas. Entonces, hay que formar brigadas en el campo y para eso el Gobierno tiene que ir de arriba hacia abajo para capacitar. Nosotros necesitamos un plan de acción, si están alejados de la sociedad civil, no funciona, hay que articular", subrayó.
Incendios forestales en Luya, Amazonas. Foto: Municipalidad de Luya-Lámud/Facebook
Al preguntarle cómo fue la labor de Indeci, Asenjo, tajamente, dijo que solo fueron tomar fotografías, mientras estaban en el campo de emergencia.
"Indeci de Lima no hizo nada, solo vino a tomarse fotos, estaban parados y solo tomaron fotos. ¿Cuánto dinero se gastó ahí en lugar de invertir en indumentaria para los bomberos, en máscaras y zapatos para incendios?", cuestionó.
Si bien es cierto, siempre se han reportado incidencias de incendios forestales, y según la presidenta Dina Boluarte, estos fueron ejecutados por mano humana debido a costumbres y creencias ancestrales. Sin embargo, cada región es única.
"Siempre culpamos al agricultor, ¿por qué quema?, porque quiere que llueva, quiere que haya riego, no pueden sembrar. Hay pérdidas enormes de cosechas de papas. Si ellos tuvieran riego en sus parcelas, pensarían diferente. Entonces, hay un problema en el Estado", sostuvo.
"Tiene que haber programas, no proyectitos, sino programas integrales, de cosecha, de siembra, de regadío. La gente dice que hay que educarlos, no, hay que darles proyectos integrales, de cosecha y siembra de agua, un programa que llega a todos, la gente no quiere hacer daño a la naturaleza, quiere que llueva", agregó.
Asenjo destacó que las condiciones climáticas, las altas temperatura y la sequía también ha jugado en contra, esto aunado a los desechos contaminantes que arroja la gente en zonas fértiles.
"También hemos encontrado contaminación en la tierra, la gente, por ejemplo, tira vidrios en estas zonas y el efecto del calor más la paja seca hace que se prenda. Fuimos a un distrito afectado, y la gente nos dice: 'Nosotros no hemos quemado', pero ¿cómo se prendió? Entonces, ahí hay otro factor, la temperatura y el viento", concluyó.
Finalmente, exhortó al Gobierno de Dina Boluarte que tiene que tener una capacidad de emergencia frente a la desgracia, no llegar cuando se acabó todo, una mayor articulación ante el Gobierno Local, Regional y Central, actualizar los planes de contingencia, y que sea un Gobierno limpio y transparente.
La República intentó comunicarse con Indeci, con relación a su presencia en la región Amazonas, de acuerdo al testimonio de coordinador regional de la Mesa de Concertación de la Lucha contra la Pobreza de Amazonas, Fidel Asenjo Pérez; sin embargo, no obtuvimos respuesta. Cabe señalar que también solicitamos una entrevista a Indeci, en un primer momento aceptaron, pero luego declinaron.