Hace unos días, el Gobierno estableció la afiliación al Seguro Integral de Salud (SIS) de cuatro millones de peruanos que no contaban con un seguro médico. Elizabeth Hinostroza, flamante ministra de Salud, explica cómo se logrará el aseguramiento universal y destaca la importancia de reforzar los establecimientos de primer nivel.
Existen grandes deficiencias en el sector Salud. ¿Cómo se va a lograr atender a cuatro millones de peruanos más?
La salud es un derecho. Con el aseguramiento universal se está cumpliendo con una deuda histórica con los peruanos. Tenemos brechas en el acceso a la salud, pero vamos haciendo camino, porque si esperamos a tener todo desarrollado, habría un costo muy alto: las vidas. Y cada vida es valiosa.
¿Pero cuál será el plan?
Preocupa lo que nos falta, pero tenemos que tener una actitud de cambio, una actitud solidaria con los que más necesitan. Tener compatriotas que no gozan de un tipo de seguro debe ser una preocupación de todos los peruanos. Cuando hablamos de cobertura se cree que solo se habla del SIS, pero es algo más. Están en construcción muchas modernas infraestructuras y establecimientos de salud de primer y segundo nivel. Debemos hacer crecer todos los componentes del sistema que tengan que ver con la cobertura de la salud. Y eso es tarea no solo del sector Salud, es un mensaje transversal. Ahora tenemos el apoyo del Ministerio de Economía.
¿En cuánto tiempo pueden incorporarse estos cuatro millones de peruanos al SIS?
La afiliación es inmediata, la implementación es progresiva. Ya tenemos un padrón de un millón 800 mil afiliados. Y automáticamente el SIS ya lo cargó en su base de datos. Los restantes son posiblemente de zonas alejadas del país, que se irán incorporando poco a poco.
¿Todos ellos ya cuentan con el Plan Esencial de Aseguramiento en Salud (PEAS)?
Sí, la cobertura de salud trabaja con el PEAS, que ofrece más de 1.140 diagnósticos de las enfermedades más frecuentes para todos. Sin embargo, aún estamos trabajando en el reglamento que deberíamos tenerlo en los próximos tres meses.
Y sobre los planes complementarios, ¿se evaluará de acuerdo a la situación económica de los pacientes?
En Salud trabajamos por la necesidad de una enfermedad, no podemos limitarnos por lo económico. Pero una comisión multisectorial es quien evaluará a quiénes dirigirá los planes complementarios.
¿Considera, entonces, que no habrá un colapso en la atención en los hospitales?
Tenemos que cambiar el modelo de gestión. Tenemos un modelo muy estático, que nos lleva a esperar demasiado tiempo por una cita o consulta. No se está distribuyendo la oferta de servicios, concentramos todo en los hospitales, pero tenemos establecimientos de primer nivel que no están siendo utilizados al 100%. Debemos repotenciar la oferta de servicios. Eso es un problema que tiene que ver mucho con la gestión: fortalecer los primeros niveles que son la gran parte de las consultas y atenciones, y reservar hospitales e instituciones de mayor complejidad para problemas que realmente lo ameriten.
Fortalecer los hospitales de primer nivel implica también tener más especialistas en ellos, pero sabemos que hay un déficit de más de 16 mil. ¿Cómo se cubrirá esta brecha?
Tenemos que generar una estrategia con una evaluación bastante minuciosa para ver qué especialistas necesita el país y, en base a ello, redistribuir las plazas priorizando lo que requerimos. También nos pondremos límites de tiempo. Por ejemplo, no tenemos médicos de familia o comunitarios, ahí debería estar nuestra fortaleza para los establecimientos de primer nivel, como hay en otros países, para que se trabaje la prevención y atención. También debemos generar estrategias que den incentivos para estos médicos de especialidades.
También preocupa la falta de medicamentos...
Sí, tenemos una brecha en medicamentos. Hemos presentado el reglamento de ley de medicamentos genéricos, donde se habla de la presencia de un operador logístico. Esto no solo implicará comprar y almacenar, sino que (en) toda la cadena de suministros intervendrá para ofrecer un adecuado abastecimiento.
Es importante también evaluar la actitud con la que, muchas veces, el personal de salud atiende a las personas con discapacidad o a los adultos mayores...
Tenemos que revalorizar la gestión de salud. La gestión se apoya cambiando la actitud del personal de salud, pues así también cambiamos la actitud de los usuarios. Tenemos que tener más empatía. Pero tampoco debemos ver solo lo malo que sucede en los hospitales, pues hay quienes atienden en los establecimientos más alejados del país, vemos el esfuerzo de los serumistas, con la mejor vocación y entusiasmo.
¿Se ha contemplado algún programa de atención domiciliaria para estas poblaciones?
Hay una estrategia que vamos a desarrollar para la atención domiciliaria de adultos mayores y personas con discapacidad, pero aún no se tiene una fecha.
¿Qué viene logrando el sector Salud?
Hace un par de días nos dieron la noticia de que alcanzamos el 99% de cobertura de vacunación de enfermedades inmunotransmisibles. También la telemedicina ha implicado un ahorro de 150 millones en los dos años que se ha desarrollado, y se ha ofrecido 21 mil consultas médicas. Imagínese que para una consulta especializada se tengan que venir a la capital, es un gasto de transporte, de recursos y hasta un maltrato al usuario. Si nosotros vemos de manera integral el uso de la tecnología con la educación, así como con el cambio de actitud, el proyecto de aseguramiento universal y de cobertura en salud debería generar una actitud solidaria por todos los peruanos. Ello nos permitirá garantizar el derecho a la salud.