Desborde de quebrada inundó Baños del Inca

PRECIPITACIÓN. Cajamarca soportó tres días de torrenciales lluvias que terminaron con prolongada sequía.,Cajamarca. Las torrenciales lluvias que durante tres días se precipitaron en Cajamarca desbordaron la quebrada Tingomayo, en el distrito de Baños del Inca, inundando por completo el turístico balneario, provocando el colapso del sistema de alcantarillado. Fueron suficiente treinta minutos de fuertes precipitaciones pluviales acompañados de granizadas, rayos y truenos, para que las principales calles quedaran convertidas en verdaderos ríos, arrastrando toda clase de material y desperdicios de la parte alta de la ciudad, depositándose en los jirones Mayta Cápac y Yahuar Huaca, entre otros. Frente a la contingencia, el alcalde Teodoro Palomino Ríos se puso al frente de los trabajos de descolmatación de las calles, apoyado por escasa maquinaria pesada que al final de la jornada resultó insuficiente, y cuyos trabajos de limpieza continuarán hoy, precisó la autoridad edil, a la vez de pedir refuerzo a la Municipalidad Provincial de Cajamarca. Con palanas y escobas en mano, además de toda clase de recipientes, los vecinos salieron alarmados uniendo esfuerzos para impedir que el agua y lodo ingrese a sus viviendas; pese a ello algunas resultaron afectadas. El establecimiento de EsSalud fue una de las edificaciones que reportó una inundación total, además de cuantiosos daños materiales en sus instalaciones. La furia de las aguas que llevaban a su paso lodo y piedras ocasionó que muchos vehículos quedaran atrapados, siendo necesaria la solidaridad del vecindario para ponerlos en marcha. Los vecinos criticaron la falta de previsión en la protección de la quebrada, pues todos los años se repite la misma historia, quedando a merced de la naturaleza. Termina sequía La época de estiaje por la ausencia de lluvias puso en aprietos el abastecimiento normal del servicio de agua potable en Cajamarca, según reveló el gerente de Sedacaj, Lino Gutiérrez, invocando a la población a entrar en un severo racionamiento, porque los ríos Grande y Porcón, que sirven a la Planta de Tratamiento de Agua Potable El Milagro, bajó tremendamente su caudal, que se ha visto aliviado por las fuertes precipitaciones pluviales de los últimos días.