Los tiempos cambian, y el sexo también; es así que ahora ellas quieren estar encima. Hay que ser sinceros, a los hombres les gusta una mujer activa en la cama. Lo mejor que se puede hacer en el sexo es aprender a practicar este intercambio de papeles, de esta forma la sexualidad se convierte en algo más libre y menos estereotipado para la pareja.
La posición 'girl on top' o 'cowgirl' es orgásmica, sugestiva ymotivadora; y es por eso, una de las más demandas en la cama. Es una postura que facilita mucho la intimidad porque permite mirarse a los ojos, tocarse casi todo el cuerpo y mirar el orgasmo del otro en sus gestos y movimientos. Además, a ellas no solo les permite alcanzar antes los orgasmos, sino que se sentirán como 'diosas'. No hay técnica más visual: deja ver lo que otras posturas esconden. La cara, los ojos y sus pechos.
Algunos consejos
'Cosmopolitan', la biblia en cuanto a posturas se refiere, proporciona algunos consejos para las 'primerizas' en estas artes amatorias. “Haz que el hombre se acueste sobre su espalda y pon tus rodillas a los dos lados de su cadera. Comienza acariciando con los dedos su cuerpo hasta llegar a su miembro. Luego, con una mano sobre la cama o su pecho para sostenerte, sostén la base de su pene con la otra mano y baja lentamente sobre él”, menciona.
“Empieza a moverte de arriba a abajo para construir el clímax. También puedes descansar sobre su torso y sensualmente moverte en círculos para estimular el clítoris. Pero solo por que estés en el asiento del conductor no significa que tenga que hacer todo el trabajo: haz que envuelva tus manos alrededor de la cadera para que ayude al movimiento”.
Así es; al hombre le permite disponer de la libertad de acariciar el cuerpo de la mujer con sus dos manos. Puede agarrar sus caderas y guiarla para alcanzar el ritmo que más le estimule o con el que mejor controle la excitación. Si quiere o si está cansado, el hombre puede adoptar un papel menos colaborativo y abandonárse al ritmo marcado por su pareja.
Asimismo, los terapeutas sexuales aconsejan esta postura cuando hay problemas de eyaculación precoz masculina, puesto que permite que el hombre esté más atento a las señales de su cuerpo y, de darse el caso, avise la mujer para que pare o cambie el ritmo con el fin de controlar sus orgasmos.