Sindicatos del Ministerio de la Mujer rechazan fusión con el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social
Sostienen que atenta contra los derechos de las mujeres y poblaciones vulnerables y también sus derechos como trabajadores del sector.
Ante la propuesta del Ejecutivo de fusionar el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) y el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), los trabajadores de los ocho sindicatos del MIMP y de los programas Aurora e INABIF se han unido para defender la continuidad del sector y también sus derechos como servidores que, según indican, superan los 10,500 a nivel nacional.
Se trata de los sindicatos SINMIMP, STRAP MIMDES, SINCAS, SINTRA-INABIF, SINTRA MIMP, SUTUPE LA LIBERTAD y los Sindicatos del Programa Nacional AURORA: SINTRA AURORA y SINTRA CAS-SDF, gremios que vienen expresando su postura en plantones, vigilias y reuniones con organizaciones de la sociedad civil y ex ministras de sector.
“Rechazamos la desaparición del MIMP porque su fusión significaría perder su rectoría en las políticas públicas a favor de los derechos de las mujeres, en las políticas de la igualdad; en velar por los derechos de las niñas, niños y adolescentes; de los adultos mayores y personas con discapacidad en situación de abandono, de violencia” señaló Bethy Hernández, dirigente del Sindicato del Programa Aurora –SINTRA, en momentos en que realizaban un plantón en el frontis de la sede central, en el Centro de Lima.
Bethy Hernández también exigió al gobierno de Dina Boluarte que respete los derechos de los servidores públicos del ministerio de la Mujer y de los programas adscritos al sector. “Estamos comprometidos en defender los derechos de las mujeres, las poblaciones vulnerables, y también nuestros derechos, como trabajadoras y trabajadores. La unidad sindical está sólida y estamos preparados para enfrentar cualquier medida que ponga en peligro estos derechos”, anotó la dirigente.
En tanto, el Ejecutivo ha señalado que el propósito de la fusión del MIMP y el MIDIS es mejorar la eficacia del aparato público, evitando las duplicidades y la superposición de funciones. Además, reducir los costos actuales.
