Testigos. Ex ministra Rosario Fernández dijo que no intervino en modificaciones legales para el trabajo de la Comisión de Indultos ni en nombramientos de comisionados. Se reveló que expedientes llegaban en cajas a Palacio de Gobierno., La Comisión de Indultos y Derecho de Gracia, durante el gobierno aprista, que presidía Miguel Facundo Chinguel, tenía total discrecionalidad para proponer indultos, por encima incluso de la opinión de los ministros de Justicia de la época. Tal vez por eso mismo los comisionados miraban superficialmente los expedientes de los beneficiarios, que Facundo Chinguel les ponía sobre la mesa con un informe previamente preparado por su equipo de trabajo. Esto lo pusieron en evidencia ayer los cinco testigos presentados por el fiscal Walter Delgado ante los jueces Edgar Medina Salas, María Guillen Ledesma y Guillermo Huamán Vargas. En la audiencia que se prolongó por siete horas, a partir de las 9:30 de la mañana, declararon los abogados y ex miembros de la comisión: Marcello Croci Geiger, Sonia Mendoza Quintanilla, Renato Quiroz Zegarra y César Candela Jara y, por último, la ex ministra de Justicia Rosario Fernández Figueroa. Sin control Fernández declaró que cuando ella llegó al Ministerio de Justicia ya se habían producido una serie de modificaciones legales, que permitieron operar con autonomía a la comisión dirigida por Facundo. Se refería al Decreto Supremo 004-2007-JUS y las Resoluciones Ministeriales 193-2007-JUS y 09-2008-JUS que unificaron las diversas comisiones de Indultos y que establecieron el criterio discrecional para proponer los indultos y conmutaciones de pena. La iniciativa para emitir estas normas debió partir de las mismas instituciones interesadas, dijo Fernández, es decir, de la comisión Facundo. Además, dijo que ella no intervino en el nombramiento de los comisionados. Por lo demás, la ex ministra de Justicia dijo que ella se limitó a revisar que los expedientes con propuestas de indultos que se enviaban a Palacio de Gobierno eran los que aparecían en los proyectos de decreto supremo. En cajas "Los expedientes llegaban a Palacio de Gobierno en cajas y quedaban en un cuartito hasta que el presidente Alan García y el secretario del Consejo de Ministros los revisaran", -afirmó Renato Quiroz, miembro no permanente de la Comisión y hasta hoy asesor jurídico de la secretaría del Consejo de Ministros. Además, Quiroz reconoció que el ex presidente García realizaba correcciones a las propuestas de rebajas de pena hechas por la comisión. Por ejemplo, dijo, podía proponer una rebaja de siete años y él consideraba 7 años y medio u ocho años. Marcelo Croci, también miembro no permanente de la Comisión, señaló que sus integrantes revisaban los expedientes, previamente repartidos por la gente de Facundo. Croci no quiso o no pudo precisar quién y cómo se repartían los expedientes a cada comisionado. Sin embargo, sí recordó al hoy prófugo ex recluso Carlos Butrón dos Santos (a) "Brasil" como el coordinador de la comisión en el penal de Lurigancho. La que también se olvidó de todo fue Sonia Mendoza, otra de los integrantes no permanentes de la Comisión. Eso obligó al fiscal a mostrarle los expedientes y dejar en evidencia que estos no estaban completos. Quien sí reconoció que los expedientes eran distribuidos por Miguel Facundo fue César Candela Jara, también miembro no permanente de la Comisión. Jara negó haber sido hombre de confianza del ex secretario de la presidencia Luis Nava Guibert. Juez interfiere en la labor de la fiscalía y adelanta opinión -Las largas horas de audiencia parecieron hacer perder la paciencia al juez Edgar Medina, a cargo de la dirección del colegiado que dirige el juicio de los narcoindultos. -En al menos dos ocasiones, Medina interrumpió el interrogatorio de la fiscalía para decir que no le gustaba la técnica que utilizaba el fiscal Walter Delgado para interrogar y que eso estaba demorando la audiencia. -Sin embargo, luego que el fiscal se quejó de que adelantaba opinión, la intervención de los otros dos jueces, María Guillén y Guillermo Huamán, hizo cambiar de opinión a Medina. Así, el fiscal pudo concluir el interrogatorio. -Medina era juez mixto en Arequipa, hasta que lo promovieron a la Sala Penal Nacional para ver este juicio. Le faltó ver que los testigos no están dispuestos a colaborar con la fiscalía.
