Muerte de José Miguel Castro truncó declaración contra su cuñada acusada de lavado

Entre los 21 acusados por el caso de la entrega de sobornos de Odebrecht y OAS a Susana Villarán y a sus cómplices, se encuentra Daniela Maguiña Ugarte, hermana de Paula Maguiña Ugarte, la esposa de uno de los más importantes testigos, José Miguel Castro. Paula Maguiña estaba en la casa cuando Castro perdió la vida en la mañana del domingo 29 de junio.

Como parte de sus declaraciones como aspirante a colaborador eficaz, el exgerente de la municipalidad limeña en la gestión de Villarán, debía corroborar las imputaciones de la fiscalía sobre el aporte de US$11 millones de Odebrecht y OAS. El dinero, o parte de el, se destinó al financiamiento de las campañas contra la revocatoria de la alcaldesa, así como para su reelección en el sillón municipal, y así asegurar los negocios de las constructoras brasileñas. En esta trama, Daniela Maguiña Ugarte cumplió un papel fundamental.

La fiscalía solicitó a Castro que confirmara el esquema que armó la organización de Susana Villarán para lavar el dinero ilícito de Odebrecht y OAS. Los acusados formaron la Asociación Amigos de Lima Metropolitana para administrar los fondos y los gastos de las campañas con los fondos corruptos. Para la conducción de la estratégica Dirección de Asuntos Económicos de la asociación, los conspiradores designaron a una persona de confianza, Daniela Maguiña Ugarte, la cuñada de José Miguel Castro. Esto fue el 29 de enero de 2013, según Registros Públicos.

Durante la gestión de Castro en el municipio limeño, su familia política ocupó varios cargos.

Su cuñada Daniela Maguiña Ugarte, antes de trabajar para la Asociación Amigos de la Municipalidad de Lima, fue designada gerente de Defensa del Ciudadano del municipio capitalino, y su esposo, Álvaro Espinoza Benza, fue nombrado presidente de la Empresa Municipal Administradora de Peaje (Emape).

Además, su suegra Dora Ugarte Ubillús, obtuvo varias consultorías en la misma gestión de Villarán.

La diligencia judicial en la que Castro debía confirmar el papel que cumplió en el mecanismo de lavado del dinero sucio de Odebrecht y OAS no podrá cumplirse por la muerte inesperada del exgerente municipal y brazo derecho de Susana Villarán.

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Administración de dinero sucio

La fiscalía pide 15 años de cárcel para Daniela Maguiña Ugarte como autora de los delitos de asociación ilícita y lavado de activos, lo que revela el grado de responsabilidad que se le atribuye en el caso. Se esperaba que Castro con su declaración contribuyera en sostener la imputación fiscal contra su cuñada.

“José Miguel Castro venía cada 15 días a la fiscalía. Se acordó que confirmaría lo que había señalado en sus declaraciones durante la investigación. Es decir, la aceptación de los cargos imputados por parte de la fiscalía, así como información sobre la intervención que han tenido los demás acusados en estos hechos”, dijo el fiscal José Domingo Pérez a La República.

Según la fiscalía, el dinero que Susana Villarán recibió de Odebrecht y OAS fue canalizado a la entidad Asociación Amigos de Lima Metropolitana, formada con la expresa finalidad de gastarlo en las campañas contra la revocatoria y por la reelección de la exalcaldesa. El propio Castro lo confirmó.

“¿Cuál fue el destino que se dio a los aportes de las empresas Odebrecht y OAS?”, le preguntaron en la fiscalía.

“Sí, conozco que el destino fue el pago de publicidad masiva en varios medios de comunicación, como canales y radios,el pago a agencias publicitarias, el pago de asesores políticos y de estrategia, y demás gastos”, contestó.

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Como un negocio familiar

Todos esos desembolsos los hizo la Asociación de Amigos de Lima, donde actuaba como administradora la cuñada de José Miguel Castro, Daniela Maguiña Ugarte. Maguiña respondía a las órdenes de su cuñado.

Así lo señala la fiscalía en la acusación: “Esta organización contó con una líder que es la imputada Susana Villarán de la Puente (y estaba estructurada de la siguiente manera: Nivel I: núcleo duro o grupo central integrado por la líder, Susana Villarán, y como jefe, José Miguel Castro. (…) Además esta organización contó con un Nivel III, de jefaturas por áreas, constituido por (…) un área de administración de los activos ilícitos integrado por (…) Daniela Maguiña Ugarte (entre otros)”.

Daniela Maguiña, la cuñada del fallecido José Miguel Castro, tuvo la misión de registrar la asociación con el propósito de captar y lavar el dinero de Odebrecht y OAS. Se sumó a la organización criminal con ese objetivo, conforme a la imputación fiscal.

Muerto José Miguel Castro, dicha acusación no podrá sustentarse como había planeado la fiscalía.

El fiscal José Domingo Pérez estaba muy confiado en las declaraciones corroborativas de Castro. Cuando lo vio por última vez, el martes 24 de junio, lo encontró algo ansioso por el inicio del juicio oral previsto para el 23 de septiembre de este año. Pero este no le habló de algún tipo de peligro que se cernía sobre él.

“El martes pasado asistió a la fiscalía y se mostró preocupado por los casos que están en curso, sobre todo porque se iba iniciar el juzgamiento. En ningún momento manifestó alguna amenaza o riesgo, de lo contrario se habrían tomado las acciones correspondientes”, declaró a este diario el fiscal Pérez.

Suponiendo que fue un suicidio, ¿lo hizo para no confirmar la acusación de la fiscalía contra su cuñada Daniela Maguiña Ugarte?