Gobernador de Madre de Dios tras ataque a su casa: "Este es un problema nacional, no regional"
Luis Otsuka hizo un llamado al Ejecutivo para resolver lo antes posible la crisis del país debido a que los pedidos de sus conciudadanos escapa de sus manos, sostuvo.
Una turba de sujetos, casi al medio día de este viernes 27 de enero, llegó hasta la vivienda del gobernador de Madre de Dios, Luis Otsuka, e iniciaron un ataque con piedras y palos. Fue entonces que la autoridad comenzó a realizar disparos desde la ventana del segundo piso de vivienda para dispersar a los vándalos. Superada esta situación, aún contrariado, Otsuka se dirigió al Ejecutivo.
Mientras era entrevistado por La Red de Noticias Madre de Dios, Luis Otsuka se dirigió a la presidenta Dina Boluarte: "este problema no es regional, este problema es nacional", aseveró visiblemente afectado para luego cuestionar el hecho de que la Policía Nacional haya asignado 8 agentes a su vivienda, los mismo que no contaban con sus armas de reglamento.
"Han intentado incendiar mi casa, querían entrar y derribar la puerta", sostuvo para luego reclamar al primer ministro, Alberto Otárola por enviar "a una guerra sin armas a sus soldados, es lo mas absurdo. ¿El costo social es que me maten a mí? Por favor, ¿qué tengo que ver en esta huelga yo?", prosiguió.
PUEDES VER:
Vándalos atacan vivienda de gobernador de Madre de Dios y autoridad responde con disparos
Casi al finalizar pidió al Ejecutivo que resuelva la crisis que se registra en el país. "Esto escapa de mi control, yo porqué tengo que sufrir las consecuencias de la irresponsabilidad de muchas personas a nivel nacional", dijo para luego mostrar los diferentes destrozos que sufrió su casa así como sus vehículos, luego que una lluvia de piedras impactaron contra su propiedad. Explicó que los vandalos pretendían ingresar con escaleras por la parte posterior de su vivienda.
Otsuka es cuestionado por la supuesta reunión que mantuvo con Alberto Otárola, quien aseguró visitar la región para brindar ayuda; sin embargo, con su llegada se desató el caos. Los manifestantes de la región no ven con buenos ojos al primer ministro. Incluso, el jueves 26 de enero intentaron incendiar el Gobierno Regional de Madre de Dios.
