En 2013, un terrible accidente laboral cambió la vida del joven Xiao Wei, de entonces 25 años, a quien se amputó una de sus manos. Ante dicha situación, los médicos en China tuvieron que tomar una drástica decisión para que no la perdiera: se la unieron a su pierna por un mes.
Según reportó CNN, todo inició alrededor de junio de 2013, cuando Wei perdió toda su mano izquierda mientras maniobraba una máquina de hilar en la fábrica donde trabajaba. Al ser analizado en el hospital Xiangya de Changsha, ubicado en el centro de China, un equipo quirúrgico, dirigido por el Dr. Tang Juyu, llegaron a la conclusión que dicha extremidad no podía simplemente ser colocada en el mismo lugar en el que se encontraba.
Los médicos del hospital Xiangya consideraron que lo mejor era unir la mano del joven a su pie para que no perdiera la circulación. Foto: The Guardian
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“Había grandes riesgos al volver a unir la mano directamente al brazo, ya que los tejidos de la zona cortada estaban muy dañados”, explicó el especialista a CNN.
En este sentido, la operación, considerada como “una carrera contra el tiempo”, consistió en injertar su mano a la parte inferior derecha de su pantorrilla, la cual se conectó con los vasos sanguíneos de la zona para mantener vivo el tejido.
Un mes después, cuando los tendones de su brazo ya habían sanado, los cirujanos retiraron la mano de su pierna y la volvieron a colocar en su lugar. De acuerdo al diario local Xiaoxiang Chen Bao, algunos días después del procedimiento el joven pudo mover un poco los dedos, mientras continuaba con su proceso de rehabilitación para recuperar toda la movilidad.
Así logró quedar la mano de Xiao Wei tras volver a ser unida. Foto: CNN
Xiao Wei no ha sido la única persona que ha pasado por este tipo de procedimientos. En 2017, a Antony Seward, un miembro del Cuerpo de Bomberos de la ciudad de Bristol, en Reino Unido, le cosieron la mano al abdomen luego de que una máquina le cortó sus dedos.
Es así que, luego de tres semanas, el procedimiento logró no solo mejorar la circulación de la zona, sino también separar lo que quedaba de sus dedos.