Un trágico accidente ha cobrado la vida de Ozgur Gevrekoglu, un hombre turco de 32 años, quien perdió la vida luego de recibir una bala a la altura del estómago, la cual habría sido disparada accidentalmente por su propio perro de caza.
Gevrekoglu, quien regresaba con varios amigos después de cazar en la meseta de Kizlan, Samsun, al norte de Turquía, se encontraba guardando todas sus herramientas en su vehículo cuando su perro subió hasta la cajuela de auto. En ese momento habría activado la copeta al apretar el gatillo con una de sus patas.
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Tras recibir el impacto de bala a la altura del estómago, sus amigos, quienes se encontraban en shock por lo sucedido, lo trasladaron al Hospital Estatal de Alacam; sin embargo, los médicos no pudieron hacer más para salvarle la vida.
De acuerdo a medios locales, el hombre se había convertido en padre apenas unos 10 días antes e ir a cazar significaba uno de sus principales hobbies, como se ve en imágenes que solía compartir por redes sociales.
Gevrekoglu subía constantemente fotografías de él y sus perros cazando en el bosque. Foto: Facebook
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Por su parte, la Fiscalía y la Policía a decidieron abrir una investigación, ya que algunos medios aseguran que se puede tratar de un asesinato premeditado y no de un accidente fortuito.
Incluso, según la agencia turca Anadolu, las fuerzas de seguridad habrían detenido inicialmente a uno de los amigos de Gevrekoglu que integraban el grupo de caza, quien no ha sido identificado y posteriormente fue puesto en libertad.