Un nuevo atentado tiñó de sangre el suelo afgano la mañana de este viernes 15 de octubre. Tan solo una semana después del ataque perpetrado en la provincia de Kunduz que dejó 80 muertos y 100 heridos, una explosión en una mezquita de la minoría chií, ubicada al sur de Afganistán dejó, hasta el momento, 32 fallecidos y más de 50 personas lastimadas.
Un funcionario local, que prefirió preservar su identidad en el anonimato, no descartó a EFE que los números de decesos aumenten con el transcurrir de las horas.
“El número de fallecidos evacuados hasta ahora de la mezquita es de 32 y hemos trasladado también a más de 50 heridos al hospital de Kandahar. Estas cifras no son las definitivas”, declaró.
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Atentado en Afganistán
Testigos del atentado señalaron a la cadena ToloNews que fueron tres los estallidos al interior de la mezquita Imam Bargah, una de las más importantes de Kandahar.
Hasta el momento, ninguna agrupación se ha atribuido la autoría del siniestro, pero medios internacionales apuntan a que se trataría de un nuevo ataque suicida del Estado Islámico (ISIS-K) en contra de la minoría.
Como se recuerda, los talibanes tomaron el poder de Kabul el pasado 15 de agosto y ello reavivó el accionar terrorista del ISIS-K en contra del nuevo Gobierno, pero sobre todo contra los chií, cuya adición al islam no es reconocida.
Inclusive, el Estado Islámico (EI) se atribuyó, en un escueto comunicado, el crimen del pasado 8 de octubre: “La rama afgana del EI afirmó que el ataque suicida fue perpetrado por uno de sus combatientes con un chaleco explosivo”, reportó EFE en aquella ocasión.