Un cartero de Japón es investigado por la policía tras descubrirse que acumuló en su casa 24 000 cartas y paquetes que nunca entregó a sus destinatarios porque, en sus palabras, hacerlo era “una gran molestia”.
El hecho se descubrió durante una auditoria interna del servicio de correos realizada el 20 de noviembre pasado. La entidad denunció al hombre de 61 años ante la policía local, quien a su vez remitió el caso a la fiscalía “por una presunta violación de la Ley de servicios postales”, según informó un portavoz del cuerpo policial.
Los documentos enviados a la fiscalía hacen referencia a las 1 002 cartas sin entregar que los oficiales hallaron dentro de la vivienda del acusado en noviembre.
El señalado, quien fue despedido de su puesto, se confesó responsable del hecho, asegurando no haber entregado las cartas porque “era una gran molestia”, de acuerdo con el diario The Japan Times. “No quería que mis compañeros de trabajo pensaran que yo era menos capaz que las personas más jóvenes", señaló.
Una sucursal del servicio de correos de Japón en Yokohama informó que el hombre debió empezar a ocultar las entregas en 2003, retirándose posteriormente y siendo contratado al poco tiempo por otra oficina de correos del lugar, donde fue luego descubierto.
Personal de dicha sucursal manifestó que entregarán los artículos retenidos y pedirán las disculpas del caso a los remitentes y destinatarios involucrados. “Lo descubrimos tarde, ya que el alijo de cartas estaba en su casa, y eso queda fuera de los límites de una inspección interna”, precisaron.
De ser hallado culpable, el cartero de Japón podría ser penado con una multa de hasta 500 000 yenes (más de 4 500 dólares) o incluso con la cárcel.