Dos males peligrosos. Dos de cada diez niños menores de 5 años no tiene ni el peso ni la talla adecuada. Casi seis de cada diez corren el riesgo de padecer retraso en su desarrollo motriz. Índices se han reducido, pero queda mucho por hacer.,Dos de cada diez niños cusqueños menores de cinco años no tiene ni el peso ni la talla adecuada. El cerebro de esos menores tampoco se ha desarrollado adecuadamente. Cuando sean mayores tendrán problemas en su desarrollo mental. Son niños que están atrapados por la desnutrición crónica infantil. PUEDES VER: ¿Qué ocurre cuando no te lavas bien los dientes antes de dormir? Casi seis de cada diez niños con menos de tres años tienen una sangre que no transporta suficiente oxígeno a todo su cuerpo por falta de hierro. Corren el riesgo de a futuro tener deficiencias cognitivas y padecer de un retraso en su desarrollo motriz y su rendimiento escolar. En general, esos niños están mal alimentados. Son presas de la anemia. Dos índices, que si bien se han ido reduciendo paulatinamente en la región Cusco, siguen siendo un problema importante que golpea a los niños. Un informe hecho a junio de 2016 por la Dirección Regional de Salud (Diresa) Cusco muestra cómo han evolucionado los índices de desnutrición crónica infantil y anemia (VER INFOGRAFÍA). DESNUTRICIÓN CRÓNICA En junio pasado, se evaluó a 93 mil 016 niños menores de cinco años en las trece provincias de la región imperial. De esa cifra 19 mil 294 menores están desnutridos (20.7%). Pero es en las provincias de Paruro, Chumbivilcas, Quispicanchi, Acomayo y Paucartambo, donde se tiene la mayor cantidad de niños que están mal alimentados. Mientras que en Cusco, Urubamba y Anta se registra un menor número de afectados. COMBATIR ENFERMEDAD Para combatir la desnutrición se debe empezar durante el embarazo. Es vital el control prenatal para asegurar la salud de los niños. La nutricionista Nancy Quispe recomendó consumir hierro e incorporar hábitos apropiados de higiene y alimentación. Recordó que la desnutrición fetal (peso menor de 2,500 grs.) es la forma más grave de desnutrición. Y cuando el bebé ha nacido la lactancia materna es la intervención más eficiente y de menor costo para el crecimiento y desarrollo de los niños. Desde la región se han propuesto disminuir la desnutrición en niños en 2% cada año hasta 2018. Después de esa fecha la meta será mayor. Hasta ahora el descenso ha ido en el rango del 1% y 1.5%. ANEMIA A junio de este año se evaluó a 17 mil 716 menores de tres años. De esa cifra 9 mil 867 (55.7%) sufren de anemia. Pero el grueso de afectados, se concentra en las provincias pobres de Quispicanchi, Espinar, Paucartambo, Cusco y Acomayo. En La Convención, Calca, Canas y Anta no se registra índices elevados de este mal. Sin duda causa sorpresa que la provincia de Cusco, capital de la Región Imperial, sea una de las más golpeadas por la anemia. Es aún más sorprendente que el distrito de Wanchaq, considerado como el más desarrollado, presente una tasa de anemia en niños de 63.8% igual que el populoso distrito de Santiago. Reducir esta enfermedad es otra meta en Cusco. Se pretende, según Diresa, bajar en 6% anual ese índice hasta 2018. El rango actual no pasa de 3.2%. Sobre ello, la nutricionista Nancy Quispe refiere que existe una disminución de este mal en la región, pero no en Cusco ciudad. "En el caso de la provincia, en los distritos de Wanchaq y Santiago se tiene los más altos niveles de estos males. Eso es porque hay malos hábitos alimenticios, consumen comida chatarra", explicó la experta. El director regional de Salud, Julio César Espinoza, refirió que una de las medidas dirigidas a reducir la anemia y la desnutrición es la distribución de los micronutricientes. Una de las más conocidas son las llamadas "Chispitas". Este suplemento previene la anemia y la desnutrición. Las "Chispitas" son ricas en hierro, vitamina A, complejo B y otros nutrientes. Un bebé debe consumir un sobre cada día a la hora de almuerzo.