Este año fue usado 233 veces en Lima Este. Se trata de un espacio donde un profesional entrevista por una sola vez a un menor agredido o abusado, mientras las partes escuchan desde otro ambiente. Hay 29 en todo el país y se requieren más.,En lo que va del año, según cifras del Instituto de Medicina Legal, 233 víctimas de violencia sexual han pasado por la llamada "entrevista única" en los distritos de Lima Este. PUEDES VER: Elmer Salas Ascencios: “Todavía seguiremos escuchando más casos de violencia contra la mujer” De ese total, 97 son casos de violaciones, la mayoría contra menores de edad; y 136 están referidos a denuncias por tocamientos indebidos. El procedimiento señalado, cuyo propósito es evitar que el denunciante repita su testimonio ante los múltiples operadores de justicia, se realiza en las denominadas cámaras Gesell, ambientes que no existen en todas las jurisdicciones judiciales del país. A nivel nacional se han implementado 29 de estos ambientes, 7 de ellos en Lima Metropolitana y 2 en Callao. La División de Medicina Legal de Lima Este (DML-LE), que abarca seis distritos, cuenta solo con dos cámaras Gesell, una en Santa Anita y otra en Huaycán (Ate). Además tiene en operación una "sala de entrevista única" en El Agustino. Williams Cruzado Vásquez, jefe de la DML-Lima Este, señala que el próximo mes se habilitará una nueva sala en San Juan de Lurigancho, lo que permitirá atender a una mayor cantidad de víctimas. ¿Cómo funciona? Cecilia Miranda, psicóloga del Proyecto Lima Este Segura, detalla que la cámara está diseñada para que la víctima solo tenga que evocar una vez los detalles del delito que sufrió. Se trata de un ambiente dividido en dos por un vidrio espejado. En el primero de ellos se encuentra la víctima con un psicólogo especialista, quien se encarga de guiar la conversación para obtener la información necesaria para la etapa judicial. En el otro ambiente se encuentran todas las partes involucradas en el proceso, quienes tienen la opción de formular preguntas a la víctima a través del psicólogo (ver infografía). "Quien dirige la diligencia es un fiscal. Se canalizan las preguntas de las partes a través de un auricular a la psicóloga en la otra sala, quien adapta las interrogantes de acuerdo al lenguaje del niño para que la conversación sea espontánea. No se trata de un interrogatorio", explica Álvaro Castañeda Rojas, fiscal provincial titular de Huaycán (Ate). Tras culminar la charla, que se registra en audio y video, un digitador realiza una transcripción que, más adelante, utiliza el psicólogo para elaborar su informe con las conclusiones y recomendaciones. "Requerimos más psicólogos especializados. Hay una falencia tremenda de estos profesionales. Ya hemos solicitado al fiscal de la Nación. Tengo entendido que ya ha iniciado el trámite para que el Ministerio de Economía le dé el presupuesto necesario", declaró a La República Cruzado Vásquez. De acuerdo con el Ministerio de la Mujer, entre enero y agosto de este año se registraron 2.369 denuncias de violación sexual en el país. De ese total, el 25% ocurrió en Lima, donde el 69% de las víctimas fueron menores de edad. Alto costo En el Perú existe 31 "salas de entrevista única". A diferencia de las cámaras Gesell, estas salas no tienen un vidrio espejado, por lo que su implementación suele costar S/10 mil. Una cámara Gesell puede costar entre 60 mil y S/ 80 mil.
