Juicio. Ministerio Público argumentó que Marco Álvarez era jefe político militar de Huancavelica cuando se produjo la desaparición de Lucho Manrique Escobar, en 1989.,El Ministerio Público reiteró el pedido de 20 años de prisión para el alcalde de San Borja, Marco Álvarez Vargas, por la desaparición forzada de Lucho Manrique Escobar en noviembre de 1989, en Huancavelica. PUEDES VER: Chlimper, Rey y Cuba juran como directores del BCR Con la acusación fiscal, el juicio que realiza el colegiado "B" de la Sala Penal Nacional entra en su fase final y en las próximas semanas se debe dictar sentencia. En las siguientes audiencias el abogado de Álvarez Vargas deberá exponer su tesis de defensa. La Fiscalía atribuye al actual burgomaestre responsabilidad en la desaparición de Manrique Escobar, en su condición de jefe del comando político militar de Huancavelica. Álvarez, entonces coronel del Ejército, se ha defendido señalando que no tenía ese cargo y que su presencia, el día de los hechos, en la Casa Rosada, sede del Comando Político Militar de Huancavelica, fue circunstancial. La Casa Rosada El hoy alcalde de San Borja afirma que el 6 de noviembre estuvo en la Casa Rosada porque el Comandante General de la II Región Militar le solicitó que vaya para desempeñar la labor de "observador electoral". Sin embargo, durante el desarrollo del juicio, el Ministerio de Defensa confirmó que Álvarez sí fue jefe político militar de Huancavelica, con el grado de coronel. Lucho Manrique tenía 33 años y trabajaba en la imprenta de la CORDE Huancavelica, cuando la madrugada del 6 de noviembre de 1989, un comando militar allanó su casa y se lo llevó acusándolo de colaborar con Sendero Luminoso. Hasta hoy no aparece. Sus familiares denunciaron la irregular detención en el Ministerio Público. La Fiscalía solicitó a los militares información sobre lo ocurrido, y en un oficio de respuesta, firmado por el propio coronel Álvarez Vargas, dice que su comando no ha ordenado la detención de Lucho Manrique. Por todo esto, la Fiscalía subraya que Álvarez tenía poderes para efectuar detenciones y operaciones antisubversivas, como la desarrollada durante la detención y desaparición de Manrique Escobar. Otros tres testigos han corroborado que Álvarez Vargas era el oficial de más alta graduación en Huancavelica y que era el jefe de todas las dependencias militares. El comando no es el jefe La defensa de Marco Álvarez señala que los oficios remitidos por la Fiscalía y el oficio de respuesta no corroboran que él fuera el jefe del Comando Político Militar de Huancavelica. Además, sostiene que el oficio es apócrifo porque tiene un sello como comando político militar y un sello que dice jefe político militar, y que ambos cargos no son los mismos y eran ocupados por personas distintas.