Hace unos días el Presidente inauguró un espacio televisivo conducido por él mismo en el que entrevistará a distintas personas. La noticia ha alborotado a la opinión pública y ha generado una serie de comentarios a favor y en contra del debut como conductor de PPK. Creo que el Presidente está en todo su derecho de hacer un programa de televisión de la índole que estime idónea; sin embargo, creo también que parte intrínseca de su propuesta es asumir las críticas que –como cualquier programa– se hacen públicamente. Esta es la mía:Pienso que sería mucho mejor que el Presidente se deje entrevistar por un periodista distinto cada semana a que él entreviste a un personaje semanalmente. La idea de que el Poder Ejecutivo necesita un espacio para comunicar los avances de su gestión me parece válida, pero insuficiente como argumento para sostener este proyecto. Todos los medios de comunicación le prestan atención constante a lo que el Presidente declara. ¿Por qué necesita un espacio extraordinario en el que pueda transmitir toda esta información?Uno de los roles de la prensa es fiscalizar la acción que el Estado lleva a cabo. Si lo que se busca es una cruzada de transparencia en la información y se pretende que los ministros y funcionarios puedan ser cuestionados sobre su gestión… ¿no es más prudente que quien haga las preguntas no tenga un conflicto de interés inmenso? Finalmente, el Presidente es el responsable político de nombrar a las personas a las que va a entrevistar. La impericia de sus futuros entrevistados para responder con solvencia es el propio Presidente.PPK ha respondido que veamos el programa a ver si aprendemos algo. Muy bien: el rating manda. Veremos. ❧
