Nací en Lima. Tengo 42 años y soy conductor del programa 'Cinescape'. En el 2015 ingresé al staff de presentadores latinoamericanos del canal de cable Warner Channel. Lancé la nueva agenda Cinescape del 2017 y ya puedes ir a comprarla en librerías y supermercados.,En el 2000 empezó como conductor del programa 'Cinescape' y desde entonces se convirtió en uno de los especialistas de cine en el Perú. A sus 42 años, Bruno reflexiona sobre la industria del cine en nuestro país. A lo largo de estos 16 años conduciendo 'Cinescape', ¿qué cambios has notado en el cine peruano? Este año a la mayoría le ha ido muy bien en la taquilla. Medianamente o superbién. Desde Locos de amor, Siete semillas, Calichín, etc. Ha sido un buen año para el cine y podemos hablar de una industria peruana que puede seguir impulsando este tipo de producciones que vengan de todos lados. Desde productores independientes hasta empresas grandes como Tondero. Las películas más taquilleras han sido las de comedia… La esencia del cine desde el día uno es entretener. Una película que cumple con entretenerte ya está. La gente quiere ir al cine a disiparse, a relajarse, y si es una cinta con la idiosincrasia de peruanos y uno se ve reflejado en el cine, mejor aún. El director de Rosa Chumbe, Jonatan Relayze, hizo este comentario: “En el país, la mayoría de ‘cine’ que se hace no es cine, es televisión de dos horas”. ¿Estás de acuerdo? En algunos casos sí. Depende de la propuesta del director. Hay algunos directores que tienen la formación audiovisual y saben cómo manejar su cámara. Hay otros a los que les llega la oportunidad de dirigir una película y simplemente hacen lo mejor que creen que deben hacer. No es fácil. El trabajo de un director es muy complejo. No es pararse detrás de una cámara y decir: “acción”. Es conocimiento y saber el lenguaje. No todo el mundo nace sabiendo, pero es importante practicar y descubrir cosas. Desde hace un año Rosa Chumbe está en lista de espera para ser proyectada… ¿por qué no se les da la oportunidad a directores peruanos? Hay un círculo vicioso difícil de romper y entender. Por ejemplo, los dueños de los cines dicen: “¿para qué voy a mantener una película si la sala está vacía y pierdo plata?”. Y está el espectador que no necesariamente va a ver un estreno. Va la semana siguiente, y esa cinta ya no está en cartelera. Lo importante es que las cadenas tengan la apertura de salas más chicas para otro tipo de cine. Cine arte, independiente, películas para adultos, etc.; 95% de películas que se estrenan en el Perú son de Hollywood y se debe guardar ese 5% para cine europeo, de la India, de Asia y peruano que no busca gran entretenimiento sino otras cosas. Finalmente, el cine es un negocio. Los cines son empresas privadas y sacan sin ningún descaro películas de cartelera, si no llenan las salas. No hay una ley que ampare el cine peruano… No. Por eso muchos productores esperan que les llegue el premio de un festival o una ONG europea con una donación. Por eso las producciones duran años. La idea es que no pase eso, ¿no? Tener la posibilidad de que exista una ley que apoye producciones con subvención o derivación de impuestos. Distintas mecánicas como ocurren en Brasil, Argentina o México.