Durante meses se difundió la información de que las personas podían contagiar coronavirus durante el período de incubación —hasta 14 días—, pero a medida que la ciencia avanzó en sus indagaciones sobre el SARS-CoV-2, se esclareció la temática.
Ahora se habla de COVID-19 prolongado (’long COVID-19′ en inglés) y sobre esto se refirió un grupo de científicos suizos por medio de un estudio publicado este martes 8 de diciembre en la revista médica Annals of Internal Medicine.
Los autores, liderados por la científica Mayssam Nehme, concluyeron que los síntomas de la COVID-19 pueden durar más de seis semanas en uno de cada tres casos tras analizar a 669 personas que dieron positivo, pero no necesitaron hospitalización.
Seis semanas después del diagnóstico, el 33% de esas personas —de los cuales 69% no tenían factores de riesgo subyacentes ante el coronavirus— todavía presentaba síntomas relacionados con la enfermedad, principalmente fatiga (14%), pérdida del gusto o del olfato (12%) y dificultad para respirar (9%).
El equipo de médicos y epidemiólogos de la Universidad de Ginebra, los Hospitales Universitarios de Ginebra y la Dirección General de Salud de la ciudad suiza recalcó que son necesarias campañas informativas acerca de la posibilidad de adquirir COVID-19 por un largo período.
“A muchos pacientes les preocupa cuánto van a durar sus síntomas y si algunos son crónicos, pero como no tenemos una respuesta médica clara, es importante acompañar a estos pacientes y escucharlos”, indicó Nehme citado por EurekAlert.
Ante esto, Pauline Oustric creó la asociación AprèsJ20 (después del día 20) para apoyar a los enfermos a falta de más información. Ella misma, de 27 años, relató que nueve meses después de contraer coronavirus no ha podido volver a una vida normal.
“Trabajamos actualmente con los médicos y los investigadores para definir qué es el ‘COVID largo’, para proponer protocolos de cuidados. Y la asociación está colaborando con los médicos para entender mejor y, sobre todo, proponer algo a los pacientes”, señaló entrevistada por AFP.
Nehme abogó por reforzar la prevención. “Todos deben darse cuenta de que las personas previamente sanas también pueden verse afectadas por la COVID-19, a semanas o incluso meses, tras la infección”.
En octubre último, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Gebreyesus, se refirió a la COVID-19 prolongada.
“No sabemos lo suficiente sobre la inmunidad a la COVID-19. La mayoría de las personas que están infectadas con el virus desarrollan una respuesta inmune en las primeras semanas, pero no sabemos qué tan fuerte o duradera es, ni en qué se diferencia cada caso”, dijo.
La Universidad de Ginebra anunció que está en marcha un estudio sobre la evolución de los pacientes a más largo plazo (tres, siete y 12 meses después de contraer el SARS-CoV-2) para entender mejor este síndrome.