Controversia. Sector Educación asegura que se busca la igualdad de género y respeto a las personas. Grupos de Pro vida y evangélicos afirman que se incentiva la homosexualidad y el aborto.,Las distintas interpretaciones que se hacen del nuevo Currículo Nacional de Educación Básica que será aplicado a partir del 2017 están generando discrepancias entre grupos religiosos católicos, evangélicos y padres de familia. PUEDES VER: Denuncian irregularidades en compra de computadoras para el sector Educación Los primeros, agrupados en la Red Jóvenes Pro Vida, han convocado para este viernes 25 a un plantón en la sede del Ministerio de Educación (Minedu). Aducen que el currículo promueve una 'ideología de género' que atenta contra la formación de los niños y adolescentes. Según la coordinadora general de esta red, Sofía Luque, con el nuevo plan curricular se hace obligatoria la enseñanza sobre los derechos sexuales y reproductivos, el aborto y la orientación de género, temas que buscarían moldear los valores y criterios de los niños desde muy temprana edad. Carlos Linares, líder del Movimiento Nacional Pro Familia, explica que cuando se habla de la orientación sexual se refiere a las inclinaciones homosexuales,lesbianismo, transexualismo, bisexualismo entre otras cosas. "Nuestros niños estarán expuestos a que los maestros, especialmente los que están alineados con la agenda pro LGTB, les enseñen que independientemente del sexo existen otras orientaciones válidas". A su turno, el presidente de las Apafas de Lima y Callao, Edgar Trejos, explicó que con este currículo el Minedu va a distribuir textos escolares en los que harán ver que las relaciones entre parejas del mismo sexo son normales. "Esos textos van a generar confusión entre los niños". En ese sentido, precisó que el martes 20 de noviembre se va a realizar una movilización hacia el Congreso para expresar su malestar, ya que para la elaboración del currículo no se consultó a las Apafas. Y desde la otra orilla, personas que usan las redes sociales para expresarse acusan a estos grupos religiosos de ser homofóbicos y que responden a grupos de poder que ven como una amenaza los avances de los derechos humanos. El Minedu aclara Y en diálogo con La República, Cecilia Ramírez, titular de la Dirección General de Educación Básica Regular del Ministerio de Educación (Minedu), aclaró que el nuevo currículo escolar no está enfocado en la ideología de género, sino en la igualdad de género que es respetar a las personas, las cuales, independientemente de su identidad de género, tienen los mismos deberes, derechos y oportunidades. Se busca a la igualdad Explicó que es importante profundizar en el tema de la igualdad de género en el nuevo currículo escolar, dado que en la actualidad se ve un desmedro hacia las niñas, las mujeres y su relación con la violencia. Asimismo, aclaró que en los textos escolares no hay comentarios relacionados a la homosexualidad. "Estamos ayudando a que el chico formen su propia identidad, que se sienta apoyado y respetado. Eso es un valor básico que se tiene que apoyar". Agregó que "no hay un tratamiento específico para una orientación sexual en particular; lo que estamos promoviendo dentro de la escuela es que todos los chicos tengan las mismas posibilidades de desarrollarse al máximo y no diferenciarse por ser hombre y mujer. En la escuela se debe fomentar el respeto hacia las personas y eso es el trabajo del profesor". Este diario constató que en la página 16 del currículo se encuentra especificada la igualdad de género que busca transformar las situaciones de desigualdad que impone la sociedad. Por ejemplo, que las mujeres limpian mejor, que los hombres no son sensibles, que las mujeres tienen menor capacidad que los varones para el aprendizaje de las matemáticas, que las mujeres son más débiles, entre otros conceptos erróneos. El nuevo currículo será implementado progresivamente en los colegios públicos y privados del país. En el 2017 se empezará en el nivel primaria de las zonas urbanas. Dato Según Cecilia Ramírez, la educación es un derecho fundamental, de modo que el Estado debe garantizar el acceso a una educación de calidad para todas las personas y erradicar toda discriminación basada en las diferencias de género.