Auditoría. Nueve oficiales y dos técnicos del Servicio de Material de Guerra (SMGE) son señalados por haber suscrito un Acta de Conformidad de Recepción del equipamiento bélico sin que tuvieran la autorización para hacerlo. Se le dio un adelanto de 23.6 millones a la empresa china Norinco sin que se verificara previamente si todo funcionaba bien.,Una de las compras más importantes del gobierno de Ollanta Humala, el lanzador múltiple de cohetes de fabricación china Tipo 90B, por un valor que supera los 38.5 millones de dólares, registra deficiencias técnicas. PUEDES VER: Compraron con fallas lanzador de cohetes chino que costó US$ 38.5 millones El Órgano de Control Institucional (OCI) del Ministerio de Defensa, que depende de la Contraloría General de la República, que aplicó una auditoría a la contratación y recepción del sistema de armas, detectó que los oficiales del Ejército encargados cambiaron las especificaciones técnicas con el aparente propósito de que la propuesta de la compañía china Norinco resultara elegida. La entidad fiscalizadora identificó como presuntos responsables a nueve oficiales y dos técnicos del Ejército. La operación de adquisición estuvo a cargo del Comité Especial Técnico Operativo (CETO), pero la parte técnica fue responsabilidad del Servicio de Material de Guerra del Ejército (SMGE). Se revisaron las propuestas de Estados Unidos (HIMARS), Federación Rusa (BM-30 Smerch), República Checa (RM-70), Brasil (Astros II), Serbia (Orkan) e Israel (Lynx). Los especialistas, en su momento, advirtieron que el lanzador de cohetes de fabricación china Tipo 90B es una copia algo mejorada del BM-21 ruso, que el gobierno del general Juan Velasco compró en los años 70. No obstante, el SMGE prefirió el material bélico chino. En 2010, el régimen de Alan García estuvo a punto de adquirir los tanques chinos MBT-2000, pero al descubrirse que contaba con tecnología ucraniana no autorizada, canceló su pretensión. Uno de los datos más relevantes del informe de auditoría es que se le pagó a la compañía china Norinco un adelanto de 23.6 millones de dólares, sin que se cumpliera con la suscripción del Acta de Aceptación Técnica en Fábrica con los efectivos preparados para tal finalidad, como exige el contrato. Es decir, estaba acordado que se le abonaría siempre y cuando los oficiales designados verificaban y daban su conformidad al material fabricado para el Ejército. Sucedió otra cosa. Los auditores detectaron algo mucho más grave. Con franela Para dar cumplimiento con la suscripción del Acta de Aceptación Técnica en Fábrica, fueron enviados oficiales y técnicos que no estaban autorizados, indican los auditores. Eran otros los efectivos a los que se había designado para dar cumplimiento a la constatación de la calidad y de las especificaciones técnicas del sistema chino de lanzador múltiple de cohetes Tipo 90B. Según los auditores, los seis inspectores del Ejército se limitaron simplemente a dar el visto bueno al equipamiento bélico, sin señalar ningún cuestionamiento y de esta manera justificar el adelanto de 23.6 millones de dólares a Norinco. "Se emitió un acta de recepción y conformidad sin observaciones, firmado por el personal militar que no estaba facultado para ello, otorgándole la conformidad de los bienes a la empresa Norinco", indica el reporte de la OCI del Mindef. Los problemas surgieron después. Cuando llegaron al Perú los vehículos del lanzador múltiple de cohetes 90B, se detectaron fallas. De haberse practicado en la fábrica del armamento un acucioso trabajo de comprobación, se podrían haber detectado las anomalías. Pero, como se indicó, un personal material que no estaba calificado viajó especialmente a China para dar la conformidad al material de guerra sin chistar. Como consecuencia, el objetivo que se buscaba con el sistema de cohetes no podrá cumplirse. "En consecuencia, el Ejército ha recibido en el Perú componentes de un sistema de artillería sin la debida verificación de las especificaciones técnicas contempladas en el estudio definitivo y en el contrato, afectando la capacidad operacional del proyecto", indican los auditores. El seguimiento detallado al proceso de compra del sistema de cohetes chinos permitió a los auditores identificar a los presuntos responsables. "(Lo sucedido)se debe a la falta de diligencia en el cumplimiento de sus funciones por parte del personal del Ejército del Perú al no supervisar y ejecutar adecuadamente los procedimientos establecidos en la normativa aplicable y no haber considerado cláusulas que cautelen y/o garanticen una adecuada verificación de las especificaciones técnicas del bien (el sistema de lanzadores de cohetes) en el Perú", concluye el reporte de los auditores de la OCI del Mindef. Fuentes del Ejército dijeron a este diario que en su momento darán respuesta a las observaciones de la Contraloría y que ofrecerán todas las facilidades para que realice su trabajo. Los señalados Entre los responsables por este caso son mencionados están: -El general de brigada (r) Wilbert Rengifo Marín, quien fuera integrante del Órgano Técnico Especializado del SMGE. -El coronel Ángel Bohórquez Ordóñez, jefe de Abastecimiento del SMGE. -El coronel Iván Galdós Díaz, jefe del Departamento de Apoyo Técnico del SMGE, quien también actuó como Inspector para la suscripción del Acta de Aceptación Técnica en Fábrica. -Comandante Carlos Arroyo Celis, miembro del Comité de Control de Calidad de Bienes y Componentes del sistema de lanzador de cohetes chino Tipo 90B. -Mayor José Perales Wong, integrante del Órgano Técnico Especializado del SMGE. -Mayor Carlos Ramos Llancachagua, miembro del Comité de Control de Calidad de Bienes y Componentes del sistema de lanzador de cohetes chino Tipo 90B. -Capitán Manuel Donayre Anchante, jefe de la Sección de Adquisiciones del Departamento de Abastecimiento del SMGE. -Capitán Emilio García Torres, integrante del Comité de Control de Calidad de Bienes y Componentes del sistema de lanzador de cohetes chino Tipo 90B. -La teniente Stefany Tapia Raymundo, miembro del mismo comité. Además de los técnicos Luis Rojas Gonzáles y Magno Alejos Álvarez, integrantes del mencionado comité. Lo barato sale caro El caso se encuentra en manos de la Procuraduría del Ministerio de Defensa, para formalizar una eventual denuncia por el caso que afecta la Seguridad Nacional. Conforme los autores del reporte, los implicados podrían ser enjuiciados por los presuntos delitos de negociación incompatible o aprovechamiento indebido del cargo. Se contemplan penas de entre 4 y 6 años. La compra se hizo en 2013 y el sistema de lanzador de cohetes fue presentado oficialmente el 18 de julio del 2015, con la presencia del presidente Ollanta Humala y el ministro de Defensa, Jakke Valakivi. En un principio, el proyecto del Ejército era comprar 40 vehículos lanzadores de cohetes de 273 mm. con un alcance de 100 kilómetros, pero luego cambiaron. Prefirieron 27 vehículos con cohetes de 122 mm. con un alcance de 40 kilómetros. Mucho menor. También se tenía prevista la compra 3.200 cohetes, pero al final se redujeron a 528 cohetes. La adquisición se hizo mediante la fórmula de gobierno a gobierno, por lo que si existen fallas en el equipamiento bélico, Perú podría reclamarle a China.