Corrupción en Brasil. Mano derecha del presidente Michel Temer presentó su renuncia luego de que el Ministro de Cultura lo acusara de presiones para la construcción de un edificio.,El ministro de la Secretaría de Gobierno, Geddel Vieira Lima, renunció de forma “irrevocable” después de ser acusado de tráfico de influencias en un asunto que salpica al presidente Michel Temer, informaron fuentes oficiales. PUEDES VER: La impopularidad de Michel Temer eclipsa la nueva etapa de Brasil “Frente a las dimensiones de las interpretaciones dadas, pido disculpas a quienes hayan sido por ellas alcanzados, pero Brasil es mayor que todo eso”, dice la carta de renuncia, dirigida a Temer y difundida por la Presidencia. Vieira Lima califica a Temer de “fraterno amigo” y dice en el primer párrafo que se “engrosaron las críticas” contra su actuación en el Ministerio de la Secretaría de Gobierno, las cuales hasta le han provocado a sus familiares un “dolor” que ya “no soporta”. La dimisión ocurrió después de que Vieira Lima fue acusado por el ex ministro de Cultura Marcelo Calero de haberle presionado en forma ilegal para autorizar la construcción de un edificio en la ciudad de Salvador, en la que había comprado un apartamento sobre planos. Calero declaró sobre el asunto a la Policía Federal y aseguró que sintió la misma presión del mismo Temer y del ministro de la Presidencia, Eliseu Padilha, con quienes también había tratado sobre ese asunto. La prensa local informó que incluso existe un audio de la conversación que Calero tuvo con Temer, la cual podría comprometer al propio mandatario en un asunto de tráfico de influencias. La existencia de la grabación fue confirmada por fuentes vinculadas a la investigación, que aún así aclararon que el audio grabado en forma clandestina no tendría “ningún valor jurídico”, pues no contaba con la debida autorización judicial, aunque según su contenido pudiera tener un “impacto político relevante”. El escándalo comenzó a gestarse hace una semana, cuando Calero presentó su renuncia por alegados motivos “personales”, aunque un día después, en una entrevista publicada por Folha de Sao Paulo, atribuyó su decisión a “presiones” ejercidas por Vieira Lima. Según Calero, el ahora ex ministro, uno de los hombres más cercanos a Temer le exigía autorizar una obra dependiente del Ministerio de Cultura en la que tenía intereses personales.