Acuerdo comercial. Fue firmado durante el gobierno de Humala. El actual Ejecutivo ya envió el acuerdo al Congreso y sobre ello no se dice nada. Aún deben absolverse los cuestionamientos respecto a los impactos en temas como la salud.,El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) fue suscrito por el gobierno de Ollanta Humala (la ex ministra Magali Silva) en febrero y el 23 de setiembre el gobierno de Kuczynski lo envió al Congreso, para su ratificación. En este momento está en la Comisión de Relaciones Exteriores. PUEDES VER: Protección a biológicos en el TPP causará gastos por S/. 491 millones Los defensores del TPP son principalmente los grupos empresariales y gubernamentales, que lo presentan como oportunidad de oro, al permitirles a las empresas peruanas enviar sus productos a los países firmantes con las ventajas arancelarias pactadas. No obstante, voces críticas, como la de Ana Romero Cano, coordinadora de la plataforma Redge, consideran que el TPP fue firmado de espaldas a los intereses nacionales. Romero dice que aún hay escasa información pública sobre el TPP y que el Parlamento tiene dos años para discutir y analizar el acuerdo, así como para que la sociedad lo conozca “hasta que se despejen todas las dudas”. Tres puntos El documento consta de 30 capítulos. En cada uno aborda un área importante y establece reglas que los países miembros deben cumplir. Esto demuestra que tratados como este son “más que acuerdos comerciales”, afirma el ex viceministro de Gestión Ambiental José de Echave. “Si uno revisa los capítulos, ahí están prácticamente todos los temas que atraviesan la discusión económica, política y social de un país”, enfatiza. Son al menos tres los puntos que el nuevo gobierno debería revisar, apunta el economista y ex gerente de Essalud Pedro Francke: los precios de los medicamentos, la restricción del acceso a contenidos de internet y el mecanismo que permitiría a las empresas demandar al Estado ante instancias internacionales por incumplir el acuerdo comercial. La ley peruana establece para cada medicamento una patente por 20 años, pero el TPP permitiría nuevas concesiones y ampliaciones de protección de datos de prueba y patentes. En la práctica, ambas impiden que sus equivalentes genéricos (más baratos) circulen en el mercado. Para medicamentos químicos, la protección de datos de prueba por cinco años ya existe, pero subirá por no menos de tres años, si se halla información clínica que conduzca a segundos usos. También puede ampliarse ante “demoras injustificadas” en su registro. Un peligro mayor representa la concesión de protección de datos de prueba por cinco años para productos biológicos, necesarios para enfermos de cáncer, diabetes u otros que requieren medicinas nuevas que ingresan al país muy caras. Por estas razones, antes de la firma del TPP, el entonces ministro de Salud, Aníbal Velásquez, le manifestó su oposición a su par de Comercio Exterior, Magali Silva. Al respecto, Silva se limitó a señalar que la duración de 20 años de las patentes no varió y que al periodo de protección de datos de prueba solo se le añadió “una ventana de acceso que inclusive lo puede reducir”. Francke advierte que estudios independientes, en el Perú y el mundo, demuestran que el TPP incrementará los precios de las medicinas. “Si hay otro estudio independiente que demuestre lo contrario, deberían mostrarlo”, agrega. Se alistan movilizaciones El 12 de octubre se realizará en Lima una movilización encabezada por el colectivo “Peruanos contra el TPP”. También habrá una manifestación conjunta en Perú, Chile y otros países de Latinoamérica para el 4 de noviembre. En el mismo mes llegará a Lima el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Obama es el principal impulsor del TPP, pero una vez que concluya su gestión es muy posible que su sucesor no siga en esta dirección, pues los principales candidatos, Donald Trump y Hillary Clinton, han manifestado su oposición al acuerdo. Si EEUU no firma el TPP, no se hará vigente para ningún otro país porque no se podría cumplir el requisito de concentrar el 85% del PBI de los 12 países involucrados.