"No lo quiero, lo necesito": estas son las valiosas colecciones que muestra el Museo del Juguete
¿Cuál es el objeto más caro? El popular 'Markitos' hizo un recorrido por los rincones del Museo del Juguete y mostró todas las figuras que tiene: una colección de recuerdos.
"No lo quiero, lo necesito", fueron las palabras de una fanática de Didi, quien llegó de Estados Unidos al Perú para llevarse esta pieza que habitaba en el Museo del Juguete. Aunque 'Markitos' y sus compañeros no suelen vender las figuras que se muestran ahí, hicieron una excepción con la señora por el gran valor sentimental que tenía el objeto. Esta no es la única anécdota emotiva que él ha presenciado, ya que esta organización no busca vender dichas piezas, sino "devolver momentos de alegría". La República visitó la casona ubicada en Breña y pudo apreciar las 'joyitas' que se lucen en cada sala.
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La creación del Museo del Juguete: ¿por qué está en una casona?
Marco Antonio Chávez, más conocido como 'Markitos' en el mundo coleccionista, contó cómo fueron los inicios del Museo del Juguete. Este proyecto nace a partir de la Feria del Juguete, él y sus compañeros se dieron cuenta de la gran demanda que había por las figuras de los años 80 y 90, y notaron que muchas de estas terminaban en el extranjero, por lo que decidieron conformar un lugar para acoger, más que nada, al producto peruano del recuerdo.
"El Perú se quedaba sin sus juguetes originales y decidimos crear el museo para enseñar a la gente que tienen unas joyas y que no los vendan al extranjero, que los coleccionen ellos o que nos lo vendan o lo dejen en el museo parte de la historia del Perú", indica; sin embargo, no todo es muestra: también hay zonas de juguetes a la venta para "dar el mantenimiento y pagar alquileres".
Aprovechando la nostalgia y el gran sentimiento que sus figuras emanan, decidieron rentar una antigua casona en Breña, a la cual reinstauraron totalmente. "Reconstruimos la casa por dentro. Un mes el personal trabajó día y noche. Cambiamos todo".
¿Qué figuras se pueden encontrar y cuál es la más costosa?
De colección, vintage, de los años 80 y 90. Todas estas piezas pueden ser encontradas en el Museo del juguete, pero en esta nota te contamos qué es lo que se vio. En el recorrido que 'Markitos' hizo por las diferentes salas, se observaron figuras originales de la marca Basa, Topogigios de diferentes temáticas, muñecos Et y Half de todos los tamaños. Además, se pueden percibir muñecas de artistas como Yola Polastri, que canta y viene con discos incluidos; las dalinas de "Nubeluz"; y la Chilindrina.
A diferencia de Yola Polastri, 'Markitos' sí tiene el micrófono de su muñeca. Foto: GLR
Personajes de programas también están presentes, como Popeye, don Gato, la familia Sinclair, la Pantera Rosa, He-Man, Ultra Man, entre otros. Además, tiene un estante exclusivo para robots de todo tipo. Como se recuerda, Rusia y Estados Unidos competían por ver quién descubría más planetas y quién fabricaba los mejores robots, por ello, se lanzaron estas figuras en los años 80.
Una colección completa de ET, desde muñecos hasta películas de este personaje. Foto: GLR
Finalmente, también se pueden apreciar vehículos de carrera de varios colores y tamaños, productos que marcas como Gloria, Guaraná, Pepsi, Coca Cola, Ñapancha lanzaron décadas atrás, puzzles de dibujos animados, álbumes completos de cantantes de la época (como Parchis) o de actuales figuras de acción.
También se encuentra Naranjito, la mascota del Mundial de España 1982. Foto: GLR
A través de su página web, se puede ver que el juguete más caro que ofrece el Museo del Juguete es un set de armas de los "Thundercats", que es muy solicitado por los coleccionistas de este programa porque Basa fue la única empresa que diseñó una máscara y un escudo, cosas que los personajes no usaban. Actualemte, el Museo del juguete lo vende en S/5.000.
El juguete más caro del museo cuesta S/ 5.000. Foto: GLR
Los coleccionistas también aportan con el Museo del Juguete
Es alta la inversión que se hizo para llenar este museo con exclusivas figuras, por lo que algunos coleccionistas no dudaron en sumarse y apoyar a esta organización, ya sea donando juguetes o contribuyendo en la publicidad de eventos.
Por ejemplo, personajes como Jorge Luna y Ricardo Mendoza, del canal de YouTube "Hablando huevadas", no tienen problemas en apoyar a 'Markitos' y sus compañeros al difundir los eventos que se organiza en la feria y en el museo. Por otro lado, el cómico Danny Rosales prestó un polo que Michael Jackson lució en su último concierto tras interpretar "Billie Jeans"; y Marco Zavala, quien es un amante de los "Thundercats", ha donado piezas a la gran galería.
¿Cómo llegan los juguetes al museo?
Los seguidores y coleccionistas pueden contactarse a través de las redes sociales del Museo del Juguete para comentar qué quisieran vender, donar o prestar a la organización. Se llega a un acuerdo y procede el envío de productos.
Durante la entrevista, 'Markitos' contó que un seguidor mandó una caja de cuadernos antiguos desde Tacna y no dudó en hacer un 'unboxing'. Él ya tenía una colección de los "Campeones galácticos" de la marca Justus, pero se llevó una gran sorpresa al descubrir que había más modelos.
"Quiero seguir averiguando sobre estos cuadernos. Quiero conocer al artista que los dibujó y que me cuente la historia. No puedo morirme sin saber qué pasó con los personajes, quiénes eran los 'Campeones galácticos'", indica. En tanto, abre el empaque y descubre más ilustraciones de Jorge Velásquez.
Señora se emociona hasta las lágrimas con una colección Lidy
'Markitos' es consciente de que la gente aflora muchos sentimientos al ver sus piezas en el Museo del juguete porque esta experiencia los traslada a su niñez, por ello, no dudó en contar el trasfondo en un video que se viralizó en redes sociales.
Una coleccionista fanática de Lidy llegó desde Estados Unidos hasta el Perú porque el Museo del Juguete tenía la casita con la que ella solía jugar en su infancia. Ella se contactó con los compañeros de 'Markitos' y les pidió que le vendieran la Casita Lidy. "No estaba a la venta, pero la señora nos suplicó que no lo quería, lo necesitaba. ¿Cómo negarnos, no?. Llegamos a un acuerdo económico y le dijimos que queríamos grabar su reacción en el 'unboxing'. Fue totalmente natural, nada armado. Ella se emocionó. Después, vio que teníamos el Parque Lidy y también lo compró. Fue una escena muy tierna. Ver a una persona feliz y que tú seas parte, no tiene precio".
