Ciencia

Vacunados que se contagian transmiten menos el coronavirus a sus familias

Un estudio hecho en el Reino Unido demuestra que la inmunización no solo protege a quien la recibe, sino también a su entorno.

Un hombre siendo vacunado contra la COVID-19 en la Abadía de Westminster. Foto: Europa Press
Un hombre siendo vacunado contra la COVID-19 en la Abadía de Westminster. Foto: Europa Press

Un equipo de investigadores de la Agencia de Salud Pública del Reino Unido (PHE) y el Instituto para la Salud de la Mujer, en la Universidad College de Londres, demostró que las personas infectadas de COVID-19 que ya habían sido vacunadas reducían a casi la mitad la probabilidad de contagiar a sus familias en una sola casa. Los científicos llegaron a tal conclusión gracias a un cruce masivo de datos extraídos de hogares británicos.

Aquellas bases de datos revisadas fueron tres: de personas que dieron positivo en una prueba PCR, de los que recibieron dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech o AstraZeneca-Oxford y, finalmente, los registros públicos de casas en el Reino Unido.

Como el hogar es el lugar más cerrado y con más gente sin mascarillas, los especialistas querían comprobar una vez más la efectividad de las inmunizaciones y sus implicancias hacia los demás.

Analizaron, en primer lugar, 365.447 casos positivos-índice, entre enero y marzo de 2021, ocurridos en casa. Todos ellos convivían con aproximadamente un millón de personas. Dentro de 14 días, se producían 102.662 contagios de COVID-19, o casos secundarios. En consecuencia, el ratio de expansión dentro del hogar llegó a la fracción de un tercio.

Del total de los casos índice, 24.217 dieron positivo después de ser vacunados, pero ninguno necesitó hospitalización, como era de esperarse.

Los firmantes del estudio liderados por el estadístico Ross J. Harris averiguaron que en las casas sin vacunados, el 10,1% de ocupantes se infectó a 14 días desde la aparición del caso índice. En cambio, se registró un 6% de nuevos casos en hogares donde el primer contagiado de coronavirus ya había sido inyectado con una vacuna. Es decir, comparando ambos datos, la inmunización rebaja en un 40% la posibilidad de que el coronavirus prolifere en casa. Este porcentaje subía en 9 puntos si el fármaco administrado era de AstraZeneca y Oxford.

“Es previsible que con dos dosis la disminución de la transmisión del virus sea aún mayor, así como que haya un menor número de personas infectadas de forma secundaria”, aclaró África González Fernández, catedrática de Inmunología de la Universidad de Vigo.

Según Ángela Domínguez, coordinadora del grupo de trabajo sobre vacunación de la Sociedad Española de Epidemiología, en el hogar, la frecuencia de contagios se extiende innegablemente y más aun si las personas no han desarrollado anticuerpos.

La carga viral de los contagiados, dijo Domínguez, es más alta que la de los vacunados; por lo tanto, las opciones de que el coronavirus siga ingresando al organismo son mayores.