Domingo de Ramos se vivió como antes de la pandemia en Arequipa
Representación. Feligreses acudieron a la Plaza Mayor de Arequipa para recibir bendición de sus palmas. En otros distritos hicieron escenificación del ingreso de Jesús a Jerusalén.
El Domingo de Ramos como se vivía antes de la pandemia fue recordado por los feligreses en Arequipa. Uno de los escenarios centrales fue la Plaza Mayor de Arequipa, donde se realizó la bendición de ramos.
Alrededor de las 10:00 horas, el arzobispo de Arequipa, monseñor Javier Del Río Alba salió de la catedral junto sacerdotes y seminaristas y se dirigió frente a la pileta, donde se armó un pequeño estrado. Allí dirigió el ritual católico.
Monseñor inició con la bendición de las palmas que tenía en mano cada uno de los asistentes que estuvieron congregados. Luego de este acto dio un sermón a la población asistente. Explicó que las palmas en Domingo de Ramos significan la llegada de Jesucristo al mundo terrenal.
"Esta palma es un premio porque han hecho un convenio con el señor, la unión familiar es lo principal deben amarse y llevarse bien con el prójimo", dijo el sacerdote.
Posteriormente, todos acudieron a la basílica de la Catedral para celebrar la Santa Misa por Domingo de Ramos.
En otros distritos como Yanahuara, la Hermandad del Santo Sepulcro realizó la escenificación del ingreso de Jesús con una imagen de él. Los miembros de la hermandad cargaron la figura y luego hicieron una procesión por los alrededores de la plaza.
Mientras que el último domingo por la tarde, las imágenes del Jesús del Gran Poder y María Santísima de las Penas fueron sacadas de la catedral para una procesión.
En el distrito de Paucarpata, también se emprendió una escenificación con una persona que representó a Jesús sobre un burro.
En la ciudad de Mollendo, provincia de Islay, la festividad religiosa también incluyó una escenificación en la que participaron algunos ciudadanos que se disfrazaron para la ocasión.
Para hoy, se espera la procesión del Cristo de la Caridad, que según la parroquia de Santa Marta, recorre las calles desde 1684.
