La Gerencia Regional de Salud (Geresa) de Cusco declaró a la Ciudad Imperial en alerta amarilla por el incremento de casos de COVID-19 en los últimos tres días. De registrar 20 casos, el último reporte de la sala situacional da cuenta de 55 contagios al día. La positividad supera el 19% y no se descarta que sea el inicio de una cuarta ola.
Para la Geresa, la razón del incremento de casos es la irresponsabilidad de los asistentes a las actividades por el mes jubilar del Cusco. “Este incremento se debe al descuido de las medidas de bioseguridad de la población durante las fiestas, como son el uso inadecuado de la mascarilla, el distanciamiento y muchos ya no se lavan las manos”, dice un comunicado de la entidad.
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Con la declaratoria, se dispone que el personal de los centros de salud fortalezca la vigilancia epidemiológica, realice la búsqueda activa de posibles casos de coronavirus, la organización de sus servicios, así como el cumplimiento de las medidas de prevención y la detección oportuna de brotes para una respuesta rápida para el control de casos.
Ante el descontrol y las aglomeraciones en las actividades del mes jubilar, el fiscal de Prevención del Delito, Eduardo Poblete, recomendó suspender el desfile cívico de la octava del Corpus Christi programada para el jueves, pero su pedido no fue aceptado por el resto de autoridades.
“Dejo a responsabilidad de los titulares de las instituciones la ocurrencia de más excesos”, advirtió Poblete. Dijo que se espera que en el Inti Raymi no se invada la explanada de Sacsayhuamán y se genere desorden.