El embate de la pandemia por coronavirus sigue generando perjuicios en el sistema de salud de Áncash. Autoridades del Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón informaron que este nosocomio ha llegado al pico más alto de hospitalizaciones desde que inicio la emergencia sanitaria, al registrar 170 pacientes internados.
Según explica la Agencia Andina de Noticias, este establecimiento tiene 80 pacientes en estado leve a moderado en el módulo temporal COVID-19, 34 en Extensión I y 42 en Extensión II, estas dos últimas áreas atienden a personas en estado crítico. Además, hay otros 14 pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), cuyos diagnósticos son reservados.
Ante esta situación las autoridades del hospital, encabezadas por el director, César Acevedo Orellano, sostuvieron una reunión. Aquí se acordó solicitar al Ministerio Público que permita usar los ambientes construidos por la gestión del detenido exgobernador Juan Carlos Morillo Ulloa; los cuales están en proceso judicial por presuntas irregularidades en su ejecución.
En estos espacios podrían funcionar un total de 12 camas para pacientes críticos que requieren alto flujo de oxígeno. Esto generaría que las áreas críticas de atención que actualmente lucen saturadas, puedan liberarse y ampliar la capacidad de respuesta.
Asimismo, en dicha reunión se acordó reducir la atención en consultorio externos con el objetivo de priorizar el personal asistencial para las labores contra la COVID-19. También se acordó la contratación de 4 médicos generales, 5 enfermeros y 5 técnicos; además existe la posibilidad de contratar a 2 emergenciólogos más.