No hay castigo eficaz para crímenes contra mujeres en Arequipa
Criterios. La Defensoría del Pueblo en Arequipa cuestionó los criterios distintos que utilizan los magistrados para formular sus sentencias sobre los casos de feminicidios. No hay uniformidad.
La justicia es un camino empedrado para los deudos de mujeres víctimas de feminicidio. Las investigaciones demoran mucho o los jueces tienen diferentes criterios judiciales en las penas y reparaciones civiles. Por ello, la oficina regional de la Defensoría del Pueblo de Arequipa instó a la Corte Superior de Justicia de Arequipa, alinear ciertos criterios para castigar el delito.
El representante de la Defensoría del Pueblo en Arequipa, Ángel Manrique, señaló que la demora y disparidad de criterios, no dan un mensaje de justicia. Arribó a esta conclusión tras el análisis de 11 feminicidios del 2017. Ahí se detectó disparidades en las penas, con condenas de cárcel entre los 8 y 25 años. Una incongruencia para Manrique, si se considera que la sentencia mínima para este grave delito es de 15 años. Igual sucede con las reparaciones civiles, que variaron entre 8 mil y 100 mil soles.
Para Manrique, urge que la Corte Superior de Justicia de Arequipa, instale un pleno jurisdiccional con diferentes actores, como el Ministerio Público y abogados de los Centros Emergencia Mujer, para definir los criterios para las penas y reparaciones civiles por feminicidios.
El estudio de 2017, también permitió identificar la demora en la resolución de los casos. De los 11 procesos, solo 4 tienen sentencia ejecutoriada. A pesar que transcurrieron más de tres años, uno sigue en investigación preparatoria (no llegó a etapa intermedia),
Además, otros dos casos fueron archivados. Sin embargo, para la Defensoría hay causales para abrirlos.
Rasgos de los casos
El análisis del 2017, también permitió establecer ciertas características de víctimas y victimarios. Por ejemplo, la mitad de las víctimas eran mujeres entre los 20 y 30 años. También se concluyó que ninguna concluyó estudios superiores profesionales. Además, cerca de un 30% era ama de casa.
En el caso de los victimarios, se halló que un 36% tenía entre 40 y 50 años de edad. No hay un patrón definido en las actividades laborales, pues se halló desde empleados, taxistas, hasta un presunto comercializador de drogas.
Sobre las circunstancias de los crímenes, 73% de feminicidios se produjeron tras la ingesta de alcohol. Otro hecho no menor, es que, en la totalidad de casos, hubo antecedentes de violencia, lo que debe ser una alerta para las víctimas, para denunciar y alejarse ante cualquier agresión.
El final de un camino de violencia
El Ministerio de la Mujer define al feminicidio como el asesinato contra mujeres por el solo hecho de su género. Se considera que es el último capítulo de un camino de violencia por parte del agresor.
Según el Programa Aurora del Viceministerio de la Mujer, hasta noviembre en la región Arequipa, se registraron 8 feminicidios.
De las denuncias presentadas ante los Centro Emergencia Mujer (CEM), el 80% es por violencia contra la mujer. Mientras que en el Ministerio Público, un 10% se archiva por desistimiento de la propia víctima.
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