“Pensamos que no la recuperaríamos”, dicen los familiares de Patricia Aguilar

Rescate en la selva de joven española. “Han sido meses muy difíciles. Pensamos que nunca la veríamos, pero no perdimos la esperanza”, dijo su prima Noelia Bru. Patricia Aguilar fue hallada en Pangoa (Junín) donde vivía en condiciones infrahumanas. Estaba al cuidado de 5 niños. Su captor, Félix Manrique, ‘Príncipe Gurdjieff’, permanecerá detenido en Lima. Lo investigan por trata de personas.,“Pensamos que no la recuperaríamos”, dicen los familiares de Patricia Aguilar ,“Pensamos que no la recuperaríamos”, dicen los familiares de Patricia Aguilar ,“Pensamos que no la recuperaríamos”, dicen los familiares de Patricia Aguilar ,“Pensamos que no la recuperaríamos”, dicen los familiares de Patricia Aguilar ,Patricia Aguilar Poveda se encontraba en el lugar y en el momento equivocado. La joven española se atravesó en el camino de una secta liderada por Félix Steven Manrique Gómez, el hombre que se hacía llamar ‘Príncipe Gurdjieff’ y que la captó a través de Internet. Allí comenzó un calvario que no termina todavía porque, aunque ya fue rescatada junto a otras dos mujeres y cinco niños, su paso por el “infierno” de la selva peruana la marcó de por vida. La pesadilla arrancó el 7 de enero del 2017. Patricia les dijo a sus padres, Alberto y Rosa María, que iba a una fiesta. Era mentira. En realidad, se había marchado hacia Murcia. Un día después, la joven de 18 años llegó a Madrid. Llevaba maletas, libros y también 6.000 euros del negocio de la familia. A la medianoche abordó el avión rumbo a una nueva vida, a un nuevo círculo de amistades, y quedó a merced de una secta liderada por Félix Manrique. PUEDES VER Patricia Aguilar: así operaba el 'gurú sexual' que tenía a la española en su secta SU FAMILIA FUE CLAVE La familia, entonces, comenzó a investigar el entorno de Patricia y halló al líder sectario. Descubrieron las intenciones del hombre que decía ser la reencarnación de George Gurdjieff, filósofo, escritor y místico armenio, guía hacia una supuesta evolución espiritual y humanitaria. Noelia, prima de Patricia Aguilar, accedió al ‘Gurdjieff’ peruano y para poder obtener pruebas del caso comenzó a contactarse por las redes sociales. Le preguntó en qué lugar se encontraba. -Estoy viajando por Sudamérica. Ando de un sitio a otro. -¿Vas con tus padres?, le preguntó ella. -Sí, pero no con los terrenales. Voy con el Espíritu Santo, con mis padres eternos. Así este hombre llegó a contactar con hasta 3.000 jóvenes a las que tenía agregadas en las redes sociales, principalmente en Facebook. La familia de Patricia también dio con una de esas chicas que estuvieron en el círculo más cercano de Félix Steven Manrique, y esta les entregó una prueba. Se trataba de un correo electrónico que este sujeto enviaba a una iglesia gnóstica de Venezuela con su nombre. Era la pista firme que llevaría a su captura. CREÍ QUE NO LA VERÍAMOS “Llegamos a pensar que no la recuperaríamos”, dijo ayer desde España, Noelia Bru, la portavoz de la familia de Patricia Aguilar. Luego, agregó: “Han sido meses muy difíciles en los que solo un núcleo cerrado de la familia sabía cómo avanzaba todo. Han sido meses de lucha, muchos tiraron la toalla, pero aunque a veces pensamos que nunca la veríamos no perdimos la esperanza”, añadió. Noelia junto con sus primos y los padres de la joven llevaban un año y medio de incansable lucha para recuperar a Patricia. Admiten que les queda un sabor agridulce por todo el apoyo que han recibido en la calle, pero dicen que les faltó el respaldo de las autoridades españolas. Los familiares de la joven española pusieron el caso en manos de las autoridades de su país, pero, aseguran, solo encontraron indiferencia. Por eso decidieron denunciar el caso en el Perú. La Fiscalía de Trata de Personas asumió el hecho. Los padres de Patricia llegaron a nuestro país el pasado mes de enero. El padre de Patricia, Alberto, retornó a España, pero en junio volvió para dar el empujón final. El miércoles la policía por fin dio con el paradero de Patricia y detuvo al llamado ‘Príncipe Gurdjieff’. Él ofrecía la salvación y de ese modo logró, tras un largo proceso que duró meses, captar a Patricia Aguilar. Tan solo tuvo que seguir su procedimiento habitual: ofrecerle una supuesta salvación que “solo él mismo era capaz de proporcionar”. Una hermana de Paola Vega Passaro –otra de las mujeres de Manrique– contó que ella dejó de hablar con su familia cuando empezó a mantener contacto con Manrique. “Ella lo conoció en una secta, en el año 2002. No conversaba mucho con nosotros. Dejó de ser sociable”, indicó. La madre de Marjorie García Valverde, otra joven rescatada en Pangoa, señaló que la última vez que vio a su hija fue en mayo. “Como estuve delicada de salud, vino porque mi hermana la contactó por Facebook. La vi unos diez minutos y se fue”, relató. PODRÍA SER UN PSICÓPATA La manipulación religiosa y mística suele ser ejercida por alguien con conocimientos y la utiliza para convencer a otros de lo que predica, sea porque realmente lo cree (delirio mesiánico) o por motivaciones psicopáticas de buscar y lograr un beneficio personal (económico, sexual, etc.), explicó el médico psiquiatra Carlos Bromley. La diferencia está en la mente y personalidad. Si ejerce sus actividades religiosas de manera directa, pública y transparente, es probable que sea una persona que está convencida de lo que predica y busca adeptos para su credo. En casos patológicos puede padecer de un delirio psicótico, añadió. Si lo hace a ocultas, con mentiras, en personas vulnerables y con un único beneficio personal, lo más probable es que estemos frente a un sujeto con personalidad psicopática que debe recibir la sanción legal que su caso amerita, subrayó Bromley. Para los padres de Patricia fueron 514 días de una búsqueda dramática. Pero con la llama encendida de esperanza para algún día volver a darle un abrazo. Y ese día llegó. DATOS - Preliminar. El Juzgado Penal de Turno Permanente de Lima dictó siete días de detención preliminar para Félix Steven Manrique Gómez. El ‘Príncipe Gurdjieff’ estará recluido en la Dirincri. - Pena. Para el abogado penalista Roberto Miranda, este sujeto puede ser procesado por trata de personas. Podría recibir una pena de entre 8 y 15 años de prisión, explicó.

“Pensamos que no la recuperaríamos”, dicen los familiares de Patricia Aguilar

Estuvo secuestrada durante 514 días por una secta en el Perú.