Cansados de vivir cerca de un foco infeccioso y contaminante, contiguo a una de las playas con mayor potencial turístico del norte del país, pobladores de Pacasmayo, La Libertad, acudieron al Ministerio del Ambiente para pedir una solución al gran problema que viene causando un camal municipal que vierte toda clase de desechos en el mar.
Mediante un escrito, los vecinos afectados de la zona conocida como Malecón Norte, pidieron a la ministra Fabiola Muñoz Dodero “intermediar ante el gobierno municipal (…) por la total indiferencia de parte de nuestra primera autoridad local frente a dos focos contaminantes que a diario vienen afectando la salud de la niñez y la población cercana”.
El documento, fue presentado el 7 de febrero por el ingeniero Eduardo Llerena, presidente de la Junta Vecinal de la Prolongación Malecón Grau, quien denuncia sobre las graves condiciones sanitarias del mencionado camal, además del sistema de alcantarillado que deposita los desechos del mismo en la playa adyacente.
Según pudo conocerse, el camal municipal funciona hace más de cuarenta años y pese a que varios alcaldes prometieron reubicarlo a fin de liberar ese sector de la contaminación que representa, el problema no se ha solucionado. La playa sobre la que desemboca el vertedero, es una de las más visitadas por surfistas de distintas partes del mundo.
Sangre de animales muertos también son vertidas sobre la playa.
“Tenemos una de las mejores playas del país, el paisaje es bonito, las olas son propicias para la práctica del deporte (surf), pero a las autoridades no les importa. Tenemos conocimiento de que se destinó un millón de soles para cerrar y reubicar el camal, pero no ha pasado nada. ¿Qué se hizo con ese dinero?”, refiere Llerena.
Los demás vecinos, en tanto, estudian recurrir a otras medidas que puedan motivar cambios concretos. “En una reunión vecinal se tomó como acuerdo agotar las vías administrativas, algo que se ha cumplido con carta dirigida al alcalde y los regidores”, señalaron.