El caso ‘Escuadrón de la Muerte’ tiene 22 policías prófugos y sólo 8 condenados

Entre los años 2012 y 2015, operó clandestinamente un “escuadrón de la muerte” integrado por oficiales y subalternos de la Policía Nacional. En dicho período los agentes involucrados asesinaron a 30 supuestos delincuentes, reclamando y recibiendo a cambio bonificaciones y ascensos de grado del Comando Policial. Ha transcurrido desde entonces casi una década y hasta el momento han sido sentenciados nada más que 8 acusados y 22 se encuentran en condición de prófugos. Y de estos, el Ministerio del Interior ofrece recompensas nada más que para 5.

El caso lo destapó La República el sábado 16 de julio de 2016. El “escuadrón de la muerte” organizó y ejecutó 9 matanzas en Lima, Piura, Chiclayo y Chincha. La propia policía atribuyó al comandante PNP (r) Raúl Prado Ravines, un especialista en inteligencia, haber creado la organización criminal.

La estructura del “escuadrón de la muerte” siempre fue la misma entre 2012 y 2015, pero siempre cambiaba de integrantes, en función de la unidad policial donde se encontraba el comandante Raúl Prado, sea en Lima en provincias. Cuando los jefes de Prado le daban luz verde para algún operativo, este convocado a los efectivos de su confianza para cometer los crímenes.

Prado solía usar señuelos para atraer a los presuntos delincuentes para asaltar o secuestrar a empresarios, o eventualmente cometer atracos de grandes cantidades de dinero.

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Los más buscados

Cuando el informante a sueldo del comandante Prado convocaba a los supuestos delincuentes en un determinado lugar, a los pocos minutos llegaban los miembros del “escuadrón de la muerte” y simulaban enfrentamientos armados para ejecutarlos. Luego el jefe policial de la zona en conferencia de prensa anunciaba el “exitoso” operativo contra la delincuencia.

El fiscal especializado en Crimen Organizado, Álvaro Rodas Farro, ha acumulado un voluminoso expediente de 20 tomos que involucra a 60 efectivos policiales.

Rodas dividió en dos casos: el Principal, que abarca 8 matanzas, y el caso Piura, en relación aún solo incidente criminal. Hasta el momento solamente en el caso Piura ha habido condenas para 8 policías, por la ejecución extrajudicial de 4 personas, registrado el 29 de junio de 2015, en Piura.

La acusación contra los responsables de las 8 matanzas que son parte del expediente Principal, todavía no ha sido formulada. El fiscal Álvaro Rodas espera hacerlo en el más breve plazo.

Una de las razones de la demora es la gran cantidad de implicados que se encuentran prófugos de la justicia desde años. Los no habidos son:

• Por el caso Santa Anita, 11 de junio de 2012 (ejecución de 3 personas): los suboficiales PNP Fernando Chuquisengo Salas, Luis Olivares Sánchez, Edgardo Vilela Mandujano, César Cutti Sueldo, Eduardo León Arroyo, Rossmel Olazábal Solórzano y Gregorio Salazar Cusinga.
• Por el caso Floresta (Chincha), 6 de septiembre de 2012 (asesinato de 2 personas): los suboficiales Rossmel Olazábal Solórzano y Ángel Flores Huané.
• Por el caso Puente Piedra, 18 de noviembre de 2012 (homicidio de cuatro personas): el coronel César Iturrizaga Cruzalegui, el teniente Luis Benavides Pardo y los suboficiales Luis Olivares Sánchez, Fernando Chuqisengo Salas, Edgardo Vilela Mandujano, Rosmell Olazábal Solórzano y Luis Salas Cusinga.
• Por el caso Chiclayo, 4 de diciembre de 2013 (crimen de seis personas): el coronel César Iturrizaga Cruzalegui y los suboficiales Carlos Llanto Ponce, Simón Ponce Briones, Luis Olivares Sánchez, Fernando Chuquisengo Salas, Edgardo Vilela Mandujano, Jorge Vilcapoma Julca, César Cutti Sueldo, Abrahamsén Ccasani Aliendre, Eduardo León Arroyo, Jesús Barreda Ramírez, Gilbert Núñez Mamani y Nelson Bances Tocto.
• Caso Los Banqueros (Santa Anita), 9 de septiembre de 2014 (un ejecutado): el coronel César Iturrizaga Cruzalegui y los suboficiales Carlos Llanto Ponce, Simón Ponce Briones, Fernando Chuquisengo Salas, Edgardo Vilela Mandujano, Jorge Vilcapoma Julca, César Cutti Sueldo, Abrahamsen Cassani Aliendre, Jesús Barreda Ramírez y Nelson Bances Tocto.
• Caso Cuna de Campeones (Chincha), el 20 de septiembre de 2012 (tres homicidios): los suboficiales Luis Olivares Sánchez, Fernando Chuquisengo Salas y Edgardo Vilela Mandujano.
• Caso Colombianos (Ate-Vitarte), 9 de octubre de 2014 (cuatro asesinados): el coronel César Iturrizaga Cruzalegui y los suboficiales Fernando Chuquisengo Salas, Jorge Vilcapoma Julca, César Cutti Sueldo y Abrahamsen Cassani Aliendre.
• Caso Ramiro Prialé (Lima), 29 de junio de 2015 (cinco homicidios): el coronel César Iturrizaga Cruzalegui, el teniente Luis Benavides Pardo y los suboficiales Simón Ponce Briones, Jorge Vilcatoma Julca, Jesús Barreda Ramírez, Gilbert Núñez Mamani, Jonathan Barrios Velásquez y Ángel Flores Huané.
• Caso Piura, 29 de junio de 2015 (cuatro fallecidos): el coronel Luis Zúñiga Saavedra y los suboficiales Irwing Castillo Mendoza, Horacio Cruz Cruz, Eileen Yovera Cisneros, Elmer Carrasco Zegarra y Gubins Fiestas Yarlequé.

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La colaboración eficaz

Destacan en la relación de prófugos del caso “Escuadrón de la Muerte”, el exjefe de la División de Investigación de Robos (Divirob) de la Dirincri, coronel PNP (r) César Iturrizaga Cruzalegui; el exjefe de la División de Investigación Contra el Crimen Organizado (Divinco) de Piura, coronel PNP (r) Luis Zúñiga Saavedra y el exoficial de la Subunidad de Acciones Tácticas (SUAT), el teniente PNP (r) Luis Benavides Pardo.

Entre los no habidos resaltan también suboficiales que laboraban directamente con el comandante Raúl Prado Ravines, del Grupo Especial de inteligencia de la PNP. Ellos son Carlos Llanto Ponce, Simón Olivares Sánchez, Fernando Chiquisengo Salas y Edgar Vilela Mandujano. Y con ellos Gregorio Salazar Cusinga, César Cutti Sueldo, Luis Castaño Martínez, Manuel Angulo Lescano y Eduardo León Arroyo.

Para la fiscalía de Crimen Organizado el “Escuadrón de la Muerte” era un grupo de aniquilamiento conformado por miembros de la Policía Nacional en actividad que realizaban falsos operativos con la finalidad de obtener ascensos, condecoraciones e incentivos económicos.

Fuentes del despacho del fiscal Rodas indicaron que los 22 oficiales y suboficiales que se encuentran prófugos podrían acogerse a la colaboración eficaz y proveer información clave sobre el funcionamiento de la organización criminal. En promedio estos policías tiene como no habidos un promedio de seis años.