El líder aprista negó haber recibido coimas y apuntó contra Toledo y Humala. También rechazó responsabilidades en casos Metro de Lima, Olmos y Collique.,El expresidente Alan García, una vez más, rechazó haber participado de alguna irregularidad en los casos de corrupción que implican a exfuncionarios y a constructoras brasileñas, en el marco de la investigación conocida como Lava Jato. “En los últimos meses, con el escándalo Lava Jato, mis enemigos dijeron como siempre: ‘Alan debe ser acusado’, pero los procesados y en cárcel son sus excandidatos y expresidentes. Yo no temo ninguna investigación y he pedido a los fiscales declarar cuanto antes sobre cualquier tema”, aseveró. PUEDES VER Odebrecht: Alan García pide a la Fiscalía declarar por el caso Metro de Lima A través de un comunicado en su cuenta de Facebook, el líder del APRA reiteró que no ha recibido coimas de empresas brasileñas y, en ese sentido, señaló a Alejandro Toledo y Ollanta Humala. “Por 5 años la mayoría del Congreso humalista gastó más de 16 millones de soles buscando hechos que me vincularan a delitos contra la administración pública. Y nada halló porque nunca existieron. Son los aventureros que se presentan como antipolíticos, quienes usan el poder para enriquecerse. Yo creo que la verdadera riqueza es la historia y el deber. Lo demás es apariencia”, acotó. Sobre la investigación preliminar de la Fiscalía que lo involucra en presuntas irregularidades en la Línea 1 del Metro de Lima, García Pérez aseveró que la denuncia se sustenta en un viaje “inesperado” que hizo al Cusco en 2009. “La ‘gran denuncia’ es un viaje de horas al Cusco con ministros, parlamentarios, cámaras, y con el funcionario brasileño el 19-02-2009, como muchos otros con decenas de empresarios para inaugurar obras. No fue ‘inesperado’; se había suspendido dos días antes por mal tiempo y los medios lo informaron. Tampoco ‘se reunió sorpresivamente’ al Consejo de Ministros esa tarde, para aprobar la transferencia del tren del municipio al gobierno. Se reunió tras la juramentación de la ministra del Interior, pues el municipio ya había aprobado la transferencia después de meses de estudios y negociación”, detalló. El exjefe de Estado sostiene que el concurso para dicha obra se convocó luego de 2 meses y se adjudicó 5 meses después, con varios postores. Olmos y Collique Alan García recuerda que el contrato del proyecto Olmos se firmó en 2004 durante la gestión de Toledo y Pedro Pablo Kuczynski, y que se entregó la ejecución de la obra al gobierno regional. “En 2010, el gobierno regional planteó la venta de las tierras en la parte agrícola y debió intervenir la ministra de Economía Mercedes Aráoz, que aumentó el precio que debía pagar la empresa por las tierras. Y en el contrato que firmaron la empresa y el gobierno regional, participó la Autoridad autónoma del Agua (Minagri) pero solo para la distribución de las aguas, pero no para las obras”, refiere. García Pérez también deslinda responsabilidades en la venta de los terrenos de Collique para que se construyeran 22 000 viviendas sociales. “Proinversión y sus comités dirigieron el proceso de licitación, y cuando, por desacuerdo, dejaron sin efecto el contrato, el Tribunal Constitucional falló ordenándoles firmar con la empresa ganadora. En ningún trámite o tema participó el presidente de la República”, finalizó.
