Del amor al odio y al amor, pero esta vez incondicional,La vida te da -a veces- la oportunidad de conseguir algo que persigues. Mi historia con Morrissey (que es mi historia con él, de alguna forma también su historia conmigo) empezó hace pocos años, realmente. Mi historia con The Smiths, en cambio, ya tiene sus buenos años, pero desde la vez que vi sus ojos azules por primera vez, Morrissey y la idea de él serían para mí mucho más de lo que jamás será The Smiths. Al ponerlo en escrito suena fuerte y pienso en Johnny Marr, y aguanto un suspiro. Siempre lo vi como un peleón por las huevas, un buscachongo lleno de ego, pero eso nunca me separó de su voz, de sus letras. Ha dicho cosas mal dichas, y malinterpretables, pero también ha dicho tantas verdades, crueles, escupidas en tu cara, sin metáforas, y eso lo hacía valioso para mí, aunque no me terminara de convencer de su personalidad fuera del escenario. Dicho esto, el 5 de julio del 2013 él estaba en Lima para dar un concierto unos días después, estuvo varios días en un hotel de Miraflores y decían que salía a firmar cosas y tomarse fotitos. Me dije ¿por qué no?, total, el man es muy capo. Entonces ese 5 de julio del 2013 salí de mi cuarto en Barranco, desayuné como a las 11 y a las 12 estaba ya haciendo la hora afuerita con mi amigo Javi, el flaco, esperando, a ver si sale. El día anterior hubo mucho problema cuando salió a ver a los fans y a una fan le robaron su entrada firmada, y él estaba claramente descontento con eso, así que no se sabía si saldría. El 5 de julio del 2013 estaba sentada ahí, haciendo cola, con fans de verdad: instruían a todos en tener paciencia, pedían orden, no hacer mucho escándalo, “nosotros estamos también muy ansiosos pero no la queremos cagar y que al ver desorden se regrese al toque”. Me cayeron bien. Javi tuvo que irse porque a las 4 debía ya estar en su trabajo, y eran 3:45. Eran las 4:16pm del 5 de julio del 2013 que salió, despacio, sonriente, dueño de todo, consciente de lo que estaba causando. Hicimos cola y, no les miento, yo estaba temblando. No entendía nada. El man ME CAÍA MAL. Pero ahí estaba yo, dándole mi agenda para que la firme y un disco de Javi, ahí estaba yo temblando, sonriendo, diciendo please y thank you very much, your eyes are amazing. Desde ese día su música sonó diferente para mí, sonó todo más bello, más fuerte, más desgarrador, más encarnado en mí. Y, porsiaca, yo lo había visto cuando vino el 2012 desde mi humilde asiento en tribuna, y la pasé de pelos, me divertí un chorro, uno de los pocos conciertos a los que he podido ir con mi tío. Pero esto fue otra cosa. Hizo un amago de sonrisa cuando nos tomamos la foto, se llevó mi alma y mi amor. Recuerdo que mientras firmaba mi agenda una chica le decía: “you’re the reason i’m a vegetarian”, a lo que él respondió: “oh, that’s not a very good reason to be one…”. Luego vino la enfermedad, el fideo maldito que se lo llevó y no tocó, hasta el 19 de diciembre del 2015. El 19 de diciembre del 2015 había tenido un día bueno pero también muy malo, lleno de sufrir porque a veces tengo 15 años. El 19 de diciembre del 2015 llegué corriendo a acreditarme y esperé, tranquila, pacientemente. Sonaba lo que parecía ser el USB con mp3s de Mozz. Me puse de pie cuando la banda salió y me decía, ni cagando, de verdad estoy viviendo esto. Siempre me quedo afónica después de un concierto porque soy de las que cantan todo el tiempo y te cagan el tono. Lo soy. No estoy orgullosa pero tampoco pido disculpas. Y particularmente este día cada frase me partía el alma, y no paraba de llorar. Inmenso, qué nivel de sentir cada nota en mi cerebro y en mi alma. Cada mensaje pro vida animal y cada crítica a esta sociedad de mierda. Ni siquiera me jodió tanto que la gente grabe con su teléfono, ni me daba cuenta, no existía nadie más. Oh, you’ve done it now. The Smiths sonó, fuerte y claro, y recordé a Johnny Marr y me dio aún más pena, ya ahora quién sabe por qué, pero todos los sentimientos estaban a flor de piel y las lágrimas ya habían salido así que ya me daba pena todo. Me daba pena no haber conocido a este hombre antes, que no me cambiara la vida antes, que no me enseñara antes todo lo que sé que me enseñó ahora. Yes, I do believe I have found mine. por: claushot