El presidente palestino, Mahmud Abás, se reunirá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y con el rey Felipe VI durante una visita a Madrid, la primera desde que España reconoció a Palestina como Estado en mayo.
El encuentro con Sánchez tendrá lugar el jueves al mediodía en el Palacio de la Moncloa, informó este miércoles la presidencia del Gobierno español.
También tiene previsto verse con Felipe VI, el jefe del Estado español, según una fuente de la Presidencia palestina.
Esta visita de Abás ocurre por "invitación de España", antes de que el presidente palestino viaje a Nueva York para participar en la Asamblea General anual de las Naciones Unidas, según dicha fuente.
El viaje se produce después de que España reconociera a Palestina como Estado el 28 de mayo, junto a Irlanda y Noruega.
Posteriormente, el Gobierno español de izquierdas anunció que se celebraría "una primera cumbre bilateral entre España y Palestina" antes de finales de año.
Felipe VI recibió las cartas credenciales del primer embajador palestino en España el lunes, un gesto simbólico de reconocimiento por parte de Madrid.
Aunque Sánchez insistió en que el reconocimiento del Estado de Palestina no va contra Israel, esta decisión supuso un nuevo deterioro de las relaciones entre ambos países, que se encuentran en su punto más bajo.
Desde el inicio del conflicto en la Franja de Gaza entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, hace casi un año, el Gobierno español ha adoptado reiteradamente una postura muy crítica hacia Israel.
La guerra ha dejado al menos 41.252 muertos en el pequeño territorio, según las últimas cifras del Ministerio de Sanidad de Gaza, gobernada por Hamás, que no distingue en sus balances entre combatientes y civiles.
El conflicto se desencadenó por un ataque de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, que causó la muerte de 1.205 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de AFP basado en datos oficiales israelíes.
Los combatientes islamistas secuestraron también a 251 personas ese día, algunas fallecidas en cautiverio. De ellas, 97 siguen en Gaza, 33 de las cuales han sido declaradas muertas por el ejército israelí.
Reiterando su apoyo total a la causa palestina, Sánchez prometió, en su discurso de inicio del curso político de principios de septiembre, que España iba a "continuar presionando" al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en todas las instancias internacionales, en primer lugar ante la Corte Penal Internacional, cuyo fiscal solicitó cursar órdenes de detención contra el líder israelí y su ministro de Defensa.
España, como otros países, también se sumó a la demanda presentada por Sudáfrica contra Israel a finales de 2023 ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), máximo tribunal de Naciones Unidas, por supuesta violación de la Convención de la ONU de 1948 sobre genocidio.
"Vamos a estrechar nuestros vínculos con el Estado Palestino", reiteró Sánchez, añadiendo que la primera cumbre bilateral hispano-palestina debería dar lugar a la firma de varios acuerdos de cooperación.
A finales de la semana pasada, Madrid acogió una reunión a la que asistieron numerosos representantes de países europeos y árabes, entre ellos el primer ministro palestino, Mohamad Mustafa, para impulsar la llamada solución de los dos Estados.
La comunidad internacional debe "dar un paso decidido para alcanzar una paz justa y duradera en Oriente Próximo", dijo el líder socialista en ocasión de ese encuentro.