Texto y fotos: Aldair Mejía
Es la primera vez que entro a un área destinada a pacientes Covid-19 de un hospital público. En los últimos días, he visto a los soldados y policías que garantizan el orden durante la cuarentena, las aglomeraciones de gente en los mercados, los detenidos, pero nunca había visto a los pacientes de este mal. En el hospital Dos de Mayo se lucha día a día contra el coronavirus. En el área de cuidados intensivos, los enfermeros trataban de salvar a este señor, quien está conectado a un respirador artificial. Es muy doloroso ver esto.
Ese es el nombre del área más grande del Dos de Mayo que se encarga de los enfermos de coronavirus. Aquí están mezclados hombres y mujeres. Ayer pude ver a una docena de pacientes atendidos por enfermeras cubiertas de pies a cabeza.
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La estación de enfermeras del área COVID tiene un sistema de monitoreo por cámaras en el que se puede ver a los pacientes con síntomas más severos. Ayer, la enfermera ‘Rosa’ iba describiéndoles a sus compañeros la evolución de cada paciente.
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Hay que ir con cuidado por estos pasillos. Yo llevaba puesto un traje especial para prevenir contagios. Las personas tosen constantemente en esta área. A este señor le suministraron un jarabe que calmara su malestar.
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Una paciente contagiada de coronavirus se levantó de su cama para rezarle a una imagen del Señor de los Milagros. También se detuvo un momento ante la imagen que aparece en esta foto.
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