Nuevos procesos. Primera prueba se realizará el próximo año y la siguiente en el 2019. Se estima que serán 60 mil las plazas para el concurso. Casi 140 mil docentes contratados esperan ingresar a carrera pública. Sutep demanda más vacantes.,Poco a poco, el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski (PPK) empieza a dar detalles de cómo buscará mejorar la situación laboral de miles de docentes durante estos cinco años. PUEDES LEER: Minedu: Educación será prioridad en el presupuesto de 2017 El Ministerio de Educación (Minedu) informó que desde el 2017 hasta el 2021 se realizarán tres concursos de nombramiento de profesores que laboran en colegios públicos de diversas zonas del país. El primero de los exámenes se realizará el próximo año, el segundo en el 2019 y el tercero en el 2021, en el que acaba la gestión de PPK. Estos procesos, como establece la actual Ley de Reforma Magisterial (que sufrirá modificaciones), se realizarán cada dos años. Actualmente existen más de 378 mil profesores que imparten clases en colegios estatales. De esa cifra, 238 mil son nombrados y se ubican en una de las ocho escalas de la Ley de Reforma Magisterial, y el resto (140 mil) son contratados. Y si bien ya estos últimos perciben las bonificaciones de los nombrados, y desde julio pasado ganan igual que los maestros de la primera escala de la Ley de Reforma Magisterial (1.554 soles por laborar las mismas 30 horas), aún ellos no gozan de estabilidad laboral. “Ese es el problema porque, por ejemplo, los contratados no reciben escolaridad. Y la mayoría son profesores que cuentan con más de 10 años de servicio y tienen más de 40 años. Ese es el motivo por el que les conviene ser nombrados, porque además podrían ascender en la carrera pública”, explica el secretario general del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep), Alfredo Velásquez. Pero ¿cuántas plazas podrán abrirse en estos tres concursos de nombramiento? Según fuentes del Ministerio de Educación, de las 140 mil plazas que están siendo ocupadas por docentes contratados, 60 mil podrían ser abiertas para los próximos concursos de nombramiento; esto porque tendrían presupuesto. El resto (80 mil) son plazas que son cubiertas por profesores contratados cuando los colegas nombrados de estos fallecen, se jubilan, se enferman o piden una licencia laboral. Piden más plazas No obstante, el Sutep no está de acuerdo. Para su secretario general deberían existir 86 mil plazas que puedan acceder al concurso de nombramiento. “Estas cuentan con presupuesto y lo mejor sería que se cubran desde el primer proceso del próximo año. Ese será el pedido que exigiremos dentro de la mesa de trato directo que ya debemos empezar con el Minedu”, expresa el dirigente. Pero eso no es todo. Las fuentes del Minedu indican que en estos procesos de nombramiento se priorizará la cobertura de las plazas que corresponden al ámbito rural. “Además no habrá cambios legales con respecto a los requisitos para entrar a la carrera pública magisterial”, añaden. Al respecto, la especialista en educación Teresa Tovar señala que se debería eliminar progresivamente la modalidad del contrato, ya que en los últimos años se ha incrementado su proporción de 10% a 27%. “La mantienen porque es ahorro”, enfatiza. El experto en legislación magisterial Manuel Paiba precisa que históricamente el mayor crecimiento del número de contratados se dio en el 2015 y el 2016. También menciona que es lamentable que en el gobierno de Ollanta Humala, entre el 2011 y el 2016, haya habido un concurso en el que solo se nombró a 8 mil profesores. “Esa cifra es pequeña. Y lo mismo pasó con el gobierno de Alan García (2006-2011). En ese periodo hubo cuatro procesos de nombramiento y solo entraron a la carrera pública magisterial 29 mil 800 maestros”, asegura. Pues bien, el gobierno de PPK ahora tiene la oportunidad de cambiar esta realidad de malas cifras. ¿Lo hará? En cifras 378 mil docentes laboran en colegios públicos. De esa cifra, 238 mil son nombrados. 1% de nombrados están en la sexta escala de la carrera pública, según el Sutep. S/ 1.710 percibe actualmente un nombrado de la segunda escala que labora 30 horas.