Indicios. Jefe de Región Policial, general PNP Orfiles Bravo, sostiene que hay indicios que llamadas se hicieron desde su teléfono. , César Wilinton Muñoz Salvador (36), acusado de integrar la banda delincuencial denominada “Los Malditos de Ascope de Trujillo”, que presuntamente extorsionaba a alcaldes de la región Cusco, fue liberado. PUEDES VER: Cusco: cae integrante de banda que extorsionaba a alcaldes Las autoridades judiciales habrían considerado que no hay indicios y pruebas que demuestren su responsabilidad en los hechos denunciados. La decisión judicial no fue bien recibida por la Policía. El jefe de la Regional Policial Cusco, general PNP Orfiles Bravo Roncal, sostuvo que los agentes de la División de Investigación Contra el Crimen Organizado encontraron varios indicios que involucrarían a Muñoz en la presunta extorsión. Por ejemplo, a través de la geolocalización (rastreo de llamadas) lograron determinar que las llamadas donde se hacían pedidos a las autoridades provenían de la zona donde se hallaba el sujeto. Asimismo, a través del levantamiento del secreto de comunicaciones se estableció que las llamadas y mensajes a Humberto Huamán Auccapuma, alcalde de la provincia de Urubamba y Carmen Cusihuallpa Días, alcaldesa del distrito de Yucay, provenían del celular del acusado. Orfiles Bravo, dijo que si no habría indicios de su responsabilidad en las extorsiones a los alcaldes, el juez Omar Suárez Lipa, en enero de 2016, no habría dispuesto su detención. Los agentes de la División de Investigación Contra el Crimen Organizado confirmaron que el imputado no tenía arraigo domiciliario y según el movimiento migratorio estuvo en los países de Bolivia, Chile y Ecuador. El jefe policial, visiblemente incómodo, sostuvo que la Policía hizo un trabajo insulso al haberse trasladado hasta el norte del país para detener a Muñoz. “Desde enero se ha realizado todo un esfuerzo para dar con los presuntos implicados, se capturó a uno, se puso a disposición del fiscal Rubén Calcina Peralta y la autoridad judicial, ellos deberán rendir cuentas de su accionar”. La República intentó comunicarse con el fiscal que ve el caso, pero no obtuvo respuesta.