Preocupación. Contraloría General de la República asegura que se desconoce el uso que la empresa brasileña les esté dando. Se espera que este viernes se conozca al nuevo administrador del gasoducto.,Odebrecht aún custodia bienes del Gasoducto Sur Peruano,El consorcio Gasoducto Sur Peruano SA, formado por Odebrecht, Graña y Montero y Enagás, continúa con la custodia de los bienes del Gasoducto Sur Peruano pese a que en enero pasado perdió la concesión de ese proyecto, alertó ayer la Contraloría General de la República. "Se desconoce el uso que les está dando. Hay incertidumbre y el Ministerio de Energía y Minas (MEM) no toma las acciones del caso", dijo el contralor general, Édgar Alarcón Tejada, quien agregó que los bienes de ese proyecto estarían valorizados en 2.600 millones de dólares. PUEDES VER: Juez levanta el secreto de las comunicaciones a Nadine Heredia "Esa es una preocupación porque acarrea un incremento de los costos no definidos ni controlados. El MEM tiene que actuar de manera inmediata", agregó Alarcón. El proceso para designar al nuevo administrador del proyecto Gasoducto Sur Peruano recién culminaría este viernes 28 de abril, pese a que desde enero pasado se resolvió el contrato con el consorcio que integró Odebrecht, en medio del escándalo de corrupción Lava Jato. La etapa de inversión también se encuentra paralizada desde enero pasado debido al término de la concesión. La definición e implementación en la continuación del proyecto generaría mayores costos para el Estado. MÁS IRREGULARIDADES La Contraloría agregó que hasta hoy no existe una definición sobre el procedimiento que se seguirá luego del cierre del contrato con Odebrecht. Hasta octubre del año pasado, antes del cierre financiero que sufriera el consorcio Gasoducto Sur Peruano, el avance del proyecto fue de solo el 36,49%, en lugar del 72,7% previsto. El 4 de enero de este año, la Contraloría acreditó un equipo de control de inversiones ante el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) y el MEM para seguir el proyecto. Proyectos en la mira La Contraloría también reveló que el proyecto de modernización de la refinería de Talara, a cargo de la empresa española Técnicas Reunidas SA, incrementó su presupuesto total en 2.820 millones de dólares sin que "se registren variaciones significativas en el alcance del proyecto y la calidad de los productos finales". Dijo que de 1.335 millones de dólares pasó a costar 4.155 millones de dólares entre el 2008 y el 2017. El incremento del presupuesto para la modernización de la refinería de Talara se realizó desde los estudios de factibilidad, en el 2008, hasta la ejecución de la obra a marzo de este año. "No hemos evidenciado sustento que explique satisfactoriamente todos los gastos adicionales al incremento de presupuesto. Las condiciones de producción se mantienen tal y como se presentaron en el 2008", aseguró el contralor. Otro de los megaproyectos a los que se refirió el contralor es IIRSA Sur, que sufrió un incremento de 258% de su inversión estimada, al pasar de 1.161 millones de dólares a 4.158 millones de dólares. Los cinco tramos que comprende IIRSA Sur sufrieron millonarios incrementos de inversión a través de adendas. Por ejemplo, en el segundo tramo, la concesionaria que obtuvo la buena pro, integrada por Odebrecht, Graña y Montero, JJC Contratistas e Ingenieros Civiles, logró incrementar el presupuesto de la obra de 286 millones de dólares a 1.410 millones de dólares. En el cuarto tramo de IIRSA Sur, a cargo de la concesionaria formada por Andrade Gutierrez, Camargo Correa y Queiroz Galvao, investigadas por el caso Lava Jato, el presupuesto se elevó de 237 millones de dólares a 869 millones de dólares. Obras en Línea 2 del Metro se encuentran retrasadas La Línea 2 del Metro de Lima, que unirá Ate con el Callao e implica una inversión de más de 5 mil millones de dólares, solo presenta un avance del 15,71% respecto al 41,85% programado, alertó la Contraloría ayer, durante una conferencia en la que detalló las irregularidades detectadas en los proyectos más importantes del país. El lento avance responde a dos irregularidades: demoras del concesionario en la aprobación de los estudios definitivos de ingeniería y demora del Ministerio de Transportes y Comunicaciones en la entrega de las áreas de concesión, según el organismo de control. "Una débil coordinación entre la Dirección General de Concesiones de Transporte y la Autoridad Autónoma del Tren Eléctrico impide un adecuado seguimiento y cumplimiento de las obligaciones contractuales", informó la Contraloría. La concesión está en manos de la sociedad Metro de Lima Línea 2 SA, conformada, entre otras, por COSAPI SA.