Fiscales y procuradores de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Perú, Portugal, República Dominicana y Venezuela, reunidos en Brasilia, acordaron asumir el compromiso de "brindarse la más amplia, rápida y eficaz cooperación jurídica internacional".,El caso Lava Jato será investigado de forma multilateral,El caso Lava Jato será investigado de forma multilateral,El caso Lava Jato será investigado de forma multilateral,Procuradores y fiscales de once países que se reunieron ayer en una reunión técnica en el Memorial de la Procuraduría de la República en Brasilia acordaron la creación de equipos conjuntos de investigación que en el marco del caso Lava Jato. Esta cita fue convocada para discutir la cooperación jurídica internacional en las investigaciones que involucran a diversas empresas brasileñas, entre ellas Odebrecht. PUEDES VER: Lava Jato Perú: el inesperado giro a la negociación Participaron los fiscales y procuradores de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Perú, Portugal, República Dominicana y Venezuela. El anfitrión fue el procurador general brasileño, Rodrigo Janot Monteiro de Barros. Por el Perú asistió el titular del Ministerio Público, Pablo Sánchez. Los once asistentes firmaron la "Declaración de Brasilia sobre la cooperación jurídica internacional contra la corrupción" que, en su punto dos, señala que se promoverá "la constitución de equipos conjuntos, bilaterales o multilaterales" destinada a la coordinación de "investigaciones coordinadas sobre el caso Odebrecht y Lava Jato". La declaración añade en su punto siguiente que estos equipos conjuntos que se conformarán "actuarán con plena autonomía técnica y en desarrollo de su independencia funcional, como principio de los Ministerios Públicos y Fiscalías firmantes". Además, se acordó que se reforzará la "importancia de utilizar otros mecanismos de cooperación jurídica internacional vigentes", de manera especial "la realización de comunicaciones e informaciones espontáneas". No es lo único. Los once firmantes de la declaración señalaron la necesidad de exhortar a los ciudadanos de sus respectivos países a apoyar a las instituciones de persecución penal. Y también acordaron que insistirán en la recuperación de activos y en la reparación integral de los daños causados por el escándalo Lava Jato, lo cual incluye el pago de multas. "Reafirmamos el respecto irrestricto al principio de legalidad, el debido proceso legal y a los derechos humanos, especialmente en la lucha contra la corrupción y la criminalidad organizada transnacional", se lee en el comunicado de los fiscales y procuradores. El fiscal Sánchez viajó a Brasil acompañado del fiscal superior y jefe de la Oficina de Cooperación Judicial Internacional y Extradiciones de la Fiscalía de la Nación, Alonso Peña Cabrera. Sánchez sostuvo que la declaración supone un "compromiso conjunto" para lograr una "amplia, rápida y eficaz cooperación jurídica internacional para el caso denominado Odebrecht relacionado con presuntos pagos de sobornos por empresas brasileñas a altos funcionarios de diversos países en América". Sánchez explicó, además, que los fiscales y procuradores tuvieron un trabajo "intenso" de unas siete horas, durante las que se analizaron "casos de corrupción", y sus "implicancias judiciales y políticas". Para hoy, Sánchez, a partir de las nueve de la mañana, sostendrá una reunión con el procurador brasileño, Janot Monteiro de Barros. "el mayor escándalo" La reunión en Brasilia ha servido para que las autoridades de los países involucrados en el caso Lava Jato y en el cartel conformado por las empresas brasileñas intercambien información y arriben a acuerdos básicos de cooperación multilateral. De hecho, la próxima conformación de equipos conjuntos de investigación resulta un paso decidido en esa dirección. Y la cooperación en un tema así resulta ser indispensable. Porque, como recordaron los fiscales y procuradores en la declaración de Brasilia, Lava Jato es "el mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil". Y no se ha quedado solo en tierras cariocas. Su dimensión internacional se reveló a finales del año pasado cuando el Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que la constructora Odebrecht admitió el pago de 788 millones de dólares por concepto de sobornos en doce países de África y Latinoamérica, incluido, desde luego, el Perú. A raíz de esas delaciones se procedió a la captura de ex funcionarios del gobierno de Alan García Pérez. Y recientemente se dictó una orden de detención preventiva contra el ex presidente Alejandro Toledo, acusado de haber recibido una millonaria coima para favorecer a esa misma empresa en la adjudicación de la construcción de la carretera Interoceánica (leer notas aparte). Justamente porque el escándalo Lava Jato trasciende fronteras, los fiscales y procuradores reunidos en Brasilia tuvieron en cuenta que es necesario "auxiliar a los países interesados" en la obtención de pruebas "a fin de dar seguimiento a las investigaciones y acciones penales en sus respectivas jurisdicciones, atendiendo a los principios del derecho internacional vigente y a las leyes de cada país". ANDINA