Los rostros que entraron y salieron en los equipos de Kuczynski y Fujimori

Altas y bajas. El equipo de Pedro Pablo Kuczynski fue el que tuvo más cambios desde la campaña iniciada en el 2015. En el fujimorismo, las bajas se dieron principalmente por exabruptos y cuestionamientos personales.,Mientras que en Peruanos por el Kambio (PPK) los notorios cambios en el equipo de campaña se dieron fundamentalmente por los resultados adversos en las encuestas, en la tienda del fujimorismo las bajas tuvieron como un común denominador los exabruptos de algunos de sus voceros que, como en la campaña del 2011, fueron enviados a la refrigeradora. PUEDES VER: Kuczynski y Fujimori confrontan hoy ideas en el primer debate Tal puede ser el resumen del tránsito que han seguido hasta el momento los equipos de campaña de Pedro Pablo Kuczynski y Keiko Fujimori. Adiós, Rospigliosi En octubre del 2015, desde el entorno del candidato Kuczynski se hizo pública la contratación de la dupla de publicistas brasileños Renato Pereira y Francisco 'Chico' Méndez, de la firma PROLE. Ambos traían bajo el brazo su experiencia como asesores de campaña del venezolano Henrique Capriles, quien estuvo a punto de arrebatarle el trono a Nicolás Maduro. Sin embargo, la estrategia de campaña, en lo que se podría considerar una primera etapa, no resultó auspiciosa. Pedro Pablo Kuczynski se enfrentaba a un notorio estancamiento, mientras un adversario suyo le iba arrebatando su caudal electoral, bajo la etiqueta de la "ola morada". Según GfK, Kuczynski tenía 8,8% de intención de voto en noviembre del 2015 y para enero la cifra seguía técnicamente estancada en 9,5%. Pero en el mismo periodo, Julio Guzmán había subido nada menos que de 0,5% a 10,4%. La preocupación era obvia. Los brasileños Pereira y Méndez fueron dados de baja. En febrero, se confirmó también el retiro del ex ministro del Interior Fernando Rospigliosi como jefe de comunicación de la campaña. Junto con él dieron un paso al costado el vicepresidente del partido, Gilbert Violeta, y también el jefe de campaña para Lima, Jorge Villacorta. En el mismo mes, se produjo el alejamiento del consultor cubano Mario Elgarresta, quien al irse tiró barro y lanzó frases como "grupito politiquero" contra el entorno más cercano de Kuczynski. En el mismo contexto se conoció también el alejamiento del publicista Abel Aguilar, célebre por la creación del PPKuy en el año 2011. La nueva etapa tendría como jefe de equipo al candidato a la primera vicepresidencia, Martín Vizcarra. También cobró mayor notoriedad el ex ministro Juan Sheput. En el área de publicidad, Kuczynski convocó a los peruanos Alberto Goachet y Ricardo Chadwick, ambos directores de la agencia Fahrenheit DDB, quienes se hicieron notar de arranque con el eslogan "Se acabó el recreo". “Estamos en otra etapa de la elección, donde hay que remontar”, dijo al respecto el candidato Kuczynski. Para el tramo final, el equipo de PPK se reforzó con Avelino Guillén, el ex fiscal que sustentó con solvencia la acusación contra el reo Alberto Fujimori, por las matanzas de La Cantuta y Barrios Altos. Guillén es el vocero en temas anticorrupción y lo acompaña la ex jueza superior Inés Tello, quien condenó a los integrantes del grupo Colina. POR LA PUERTA GRANDE Distintos expertos reconocen, por otro lado, una campaña más organizada en Fuerza Popular. El núcleo duro del entorno de Keiko Fujimori, con Ana Herz como asesora personal, en términos generales, se ha mantenido. Junto a ellos se encuentra el ideólogo Pier Figari (opacado por un incidente violento en Arequipa) y la jefa del equipo del plan de gobierno, Úrsula Letona, quien hasta hoy acompaña a la candidata Fujimori. Como voceros se ha mantenido la ex procuradora Yeni Vilcatoma y, con mayor énfasis en la etapa final, José Chlimper. A ellos se fueron sumando Hernando de Soto, Elmer Cuba y el ex general PNP Eduardo Pérez Rocha. En el fujimorismo fueron situaciones personales las que alejaron a piezas claves como Vladimiro Huaroc, quien cayó tras la entrega de dádivas en Satipo. O Cecilia Chacón, tras anunciar que Fujimori saldrá por la puerta grande. Pero la baja más sonada fue la de Joaquín Ramírez, quien acaba de dejar la dirigencia del partido por el escándalo de las investigaciones en su contra, por lavado de dinero.