La campesina Máxima Acuña, quien recibió el premio internacional Goldman por su activismo a favor del medio ambiente, descartó la posibilidad de incursionar en la política y aseguró que seguirá defendiendo la naturaleza desde su querida Cajamarca. “Este tema es por defender el ambiente, no por política, la política no me interesa […] Mi orgullo es estar al frente de mi pueblo, llevar mi ejemplo, que me conozcan como una buena líder que defiende nuestra naturaleza”, declaró en Canal N a su regreso de los Estados Unidos donde recibió la distinción. Acuña, también llamada la Dama de la Laguna Azul, destacó la importancia de defender el agua y la tierra porque son fuentes de trabajo para los agricultores. “Mis padres fueron agricultores, nuestro desarrollo fue en nuestra tierra porque ahí trabajamos, nos alimentamos, criamos nuestros animales”, aseveró. También ratificó su decisión de seguir luchando contra las empresas que operan en forma irresponsable y afectan al medio ambiente.Máxima Acuña se enfrentó a la minera Newmont que pretendió desalojarla del terreno que habita junto a su familia, ubicado cerca a la Laguna Azul que Yanacocha proyecta convertir en un gigantesco depósito de desechos tóxicos. ♣