Acaba de fallecer Michael Bond, el creador del oso Paddington, quien desde 1958 ha venido manteniendo un nicho indeleble para Perú en la conciencia de los niños británicos. El célebre oso es lo que en palabras de hoy se llama un inmigrante, llegado a una estación ferroviaria (la de Paddington, precisamente) y adoptado cariñosamente por una familia inglesa.El ángulo peruano es que el amistoso Paddington llega a Londres desde “deepest, darkest Perú”. Es decir el Perú más profundo y oscuro. El autor nunca elaboró sobre si la mención alude a su hábitat como animal, o si los dos adjetivos aluden de alguna manera al Perú mismo, o alguna cosa intermedia. La diferencia tiene que haber atormentado a más de un niño lector.Pues si es el hábitat, por algún motivo el osito se ha visto expulsado de su hogar. Un oso de anteojos, la única especie de oso que circula por el Perú, en una situación de desarraigo que ni la abrigada ropa que viste puede mitigar. Nótese además que casi 60 años después el oso de anteojos, básicamente frutívoro, es una especie amenazada por la crisis de su entorno y por los agricultores.Si el motivo de profundo y oscuro es el otro, entonces Paddington es una suerte de refugiado, en una historia dulcemente colonialista, en que una bella familia inglesa lo acoge. En cualquiera de los dos casos, el misterioso salto del Perú a Londres es sin embargo elocuente: el pasado inescrutable, el buen recibimiento, que ciertamente se ha extendido a sus millones de lectores. Pero hace unos años Bond reveló unas cartas en que Paddington cuenta algo del origen de su viaje, cuando su tía Lucy, con la cual vivía, entró a un asilo: “Mi tía Lucy siempre dijo que quería que yo emigrara cuando tuviera la edad suficiente. Por eso ella me enseñó a hablar inglés”. Esto da un nuevo giro a la historia, con Paddington como un expatriado moderno, en busca de oportunidades.Lo cual a su vez pone un poco más en foco lo profundo y lo oscuro de su tierra natal. El Perú perdió a Paddington, pero los niños del mundo ganaron un primer chispazo de relación con el Perú.Esto da un nuevo giro a la historia, con Paddington como un expatriado moderno, en busca de oportunidades.
