Desde hace algunos días recibo en twitter notificaciones de cuentas con nombres bíblicos que me etiquetan en publicaciones con mensajes sobre salmos, oraciones y otras lecturas religiosas sobre las cuales no tengo el menor interés, por el contrario, me resultan absolutamente invasivos. Estos mensajes antes se limitaban a algunos grupos de chat que he silenciado y en Facebook, donde mis contactos comparten contenidos religiosos que prefiero no leer ni comentar por respeto, después de todo, ellos también ven lo que yo escribo y que no necesariamente comparten.Lo que me resulta inadmisible es cuando me etiquetan porque resulta una suerte de imposición, un intento de obligarme a ver algo que NO quiero y a leer opiniones con las que NO comulgo. Si esto no lo tolero de las personas cercanas, por qué tendría que hacerlo con gente extraña. Y digo esto porque al quejarme públicamente por ello recibo acusaciones de intolerante e irrespetuosa y hasta insultos, cuando lo único que exijo -y tengo derecho a hacerlo- es que no invadan mis espacios personales con ideologías religiosas, dogmas ni extremismos. Si hay quienes creen que darle un “me gusta” a una imagen religiosa o escribir “Amén” en una cadena de oración logrará curar a un enfermo terminal o acabar con la guerra en Siria, bien por ellos, lo respeto. Yo prefiero creer en la ciencia, en los hechos y las acciones concretas, en la ley, en los derechos humanos, la ética y el libre pensamiento. ¿No me merezco también respeto? En lugar de ello vivo bombardeada con salmos y estampitas. A los amigos les he pedido no hacerlo (aunque algunos insisten), a los otros simplemente los bloqueo.Mis posturas son claras: defiendo el matrimonio gay, los derechos de la comunidad LGTB, el aborto en casos de violación, la educación sexual en las escuelas, el enfoque de género en el currículo. Condeno la violencia de género, no me da resquemor ni me obsesiona lo que las personas hacen con su vida sexual o a quien deciden amar. ¿Alguien cree que eso cambiará porque me etiqueta en un salmo, una oración o me condenan al infierno? Ilusos.