120 mil turistas al año. Construcción del primer teleférico en el Perú dio empleo a 320 pobladores y apunta a reforzar el emprendimiento turístico en dicho circuito. Llegar a la fortaleza de Kuélap demorará 20 minutos por un precio de S/ 20.,Visitar la fortaleza de Kuélap, importante sitio arqueológico construido por la cultura Chachapoyas a 3.000 m s.n.m., le demandaba a los turistas peruanos y extranjeros hasta una hora y media en vehículo para recorrer una distancia de 4 kilómetros. Desde ahora, recorrer la misma distancia solo será de 20 minutos gracias al nuevo sistema de telecabinas inaugurado este jueves por el Gobierno peruano. PUEDES VER: CUT: Telefónica continúa con despidos masivos a trabajadores sindicalizados El teleférico de Kuélap permitirá que con el pago de S/20 (por ida y vuelta) los turistas puedan conocer la arquitectura de este antiguo centro y las imponentes murallas que datan de la época preinca. El ministro de Comercio Exterior y Turismo, Eduardo Ferreyros, explicó que la instalación del teleférico casi duplicará el número de turistas que visitan Kuélap en diez años. “Con la puesta en marcha del Sistema de Telecabinas Kuélap se estima que se logrará en el décimo año un incremento de casi el 90% de visitantes al sitio arqueológico de Kuélap y a los demás atractivos de la zona”, sostuvo el ministro Ferreyros. De este modo, el número de turistas al año pasará de 30 mil a 120 mil. Cabe destacar que aún es complicado llegar desde Lima a Kuélap. La vía tradicional es tomar un vuelo directo a Jaén, viajar a bus hacia Chachapoyas y finalmente tomar otro bus con dirección a Kuélap. Solo de Jaen a Kuélap, el trayecto demanda tres horas y media. No obstante, el Mincetur anunció que en los próximos meses se planea que una aerolínea habilite la línea comercial Lima - Chachapoyas. La estación de embarque, ubicada a 5 minutos de Nuevo Tingo, contará con ambientes administrativos y de servicio, elevador para personas con discapacidad, cafetería, tienda de souvenirs, sala de usos múltiples, estacionamiento y zona de embarque para buses con los que el turista se desplazará hacia el andén de salida. Dicho andén, de donde se partirá a Kuélap, se divide en dos ambientes: una zona de control del sistema y la zona de garaje de las 26 telecabinas. Cada cabina trasladará a 8 pasajeros a una velocidad de 6 metros por segundo. Según el ministro Ferreyros, el número de las telecabinas aumentará en la medida que crezca la demanda en Kuélap. Un total de 23 columnas soportan el cable de 8.200 metros por el cual se desplazan las telecabinas durante todo el trayecto hasta llegar al andén de llegada. Considerado el primer sistema de telecabinas en el Perú, la construcción de este teleférico empezó en agosto de 2015, en la gestión de Humala y demandó una inversión total de S/ 81 millones; generando empleo directo para 320 pobladores locales. Estará en concesión por 20 años a manos del consorcio Telecabinas Kuélap, integrado por la empresa constructora peruana Ingenieros Civiles y Contratistas Generales S.A y la empresa francesa POMA, que se encargará de la operación. La concesión también incluye el mantenimiento de la infraestructura. A este trabajo realizado por el Mincetur, se suman también mejoras en carreteras y la plaza central de Tingo. El funicular de Barranco y la historia de este transporte en Lima En julio de 1895, el alemán Rudolf Holding construyó y operó un funicular en Barranco, sistema de transporte que funcionaba con energía hidráulica y que conectaba la parte alta de Barranco con la playa. Cada cabina transportaba 28 personas en unos vagones hechos a base de pino. En 1971 dejó de operar por los costos elevados que implicaba su funcionamiento. Por otro lado, en Lima existió la propuesta de construir un teleférico que conecte el parque La Muralla (Cercado de Lima) con el cerro San Cristóbal (Rímac). Sin embargo, la empresa que ganó la licitación no cumplió con las garantías y la Municipalidad de Lima anuló el contrato. En cifras 81 millones fue la inversión total para la construcción del Teleférico de Kuélap. 90% crecerá el número de visitas de los turistas a la fortaleza en un plazo de 10 años.