Con tan solo 27 años de edad ya era toda una leyenda del rock, Jim Morrison tenía un talento inigualable en el micrófono y lo demostraba cada vez que saltaba en el escenario con la banda "The Doors". Sin embargo, el 3 de julio de 1971 fue hallado muerto en la bañera de su casa en París. La Policía informó que su deceso se produjo por un ataque al corazón, pero nunca se descartó la posibilidad de que la causa haya sido por una sobredosis de heroína. A 45 años de su partida, la voz de Jim Morrison se mantiene viva en sus canciones.
