Con casi 956.000 visitantes, el complejo de Sacsayhuaman se ubicó como el sitio arqueológico más visitado del departamento del Cusco entre enero y agosto de este año, desplazando de ese lugar al Santuario Histórico de Machu Picchu, según datos del Ministerio de Cultura (Mincul) analizados por ComexPerú.
Hasta el octavo mes del año, arribaron a Saqsayhuaman 502.659 visitantes nacionales y 453.130 extranjeros, lo que nos da un total de 955.789. En tanto, Machu Picchu solo llegaron en total 548.137 personas, de las cuales 180.194 fueron peruanos y 367.943 extranjeros.
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“Hasta antes de la pandemia del COVID-19, el santuario histórico de Machu Picchu era el principal atractivo y destino turístico del país. Sin embargo, todo cambió por dicha situación y por las malas decisiones tomadas posteriormente por las autoridades. En la actualidad, las cifras han empezado a caer a tal nivel que Machu Picchu dejó de ser el principal destino y Sacsayhuaman ha tomado su lugar”, refirió ComexPerú.
Las cifras de las visitas al Santuario Histórico de Machu Picchu han empezado a bajar, fue así que, a finales de 2022, en total solo poco más de 1 millón de turistas visitaron este lugar, mientras que Sacsayhuaman logró más de 1,8 millones, cuando las cifras antes eran opuestas.
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Para el gremio, entre las acciones que han afectado la llegada de turistas a Machu Picchu resalta la decisión adoptada en agosto del 2022 por el Ministerio de Cultura de vender el 25% de las 4.000 entradas disponibles para visitar el santuario de manera presencial en el distrito de Aguas Calientes.
Esta medida –según la Cámara de Turismo de Cusco– empezó a generar problemas logísticos por las largas colas que se forman y, además, ha provocado que muchos turistas se queden sin visitar la ciudadela.
Pero no solo ello: los gremios del Cusco han expresado que se habría generado una mafia de ventas de entradas, que está afectando seriamente la imagen del turismo de nuestro país. Dicha situación está causando que los turistas se vean obligados a quedarse un día más en la zona con el fin de visitar Machu Picchu.
El gremio indicó que los problemas de la venta presencial se aprecian con mayor relevancia cuando, pese a las largas colas que se forman y aun cuando muchos turistas se quedan sin visitar el santuario, se comprueba que en julio y agosto no se vendió la totalidad de los boletos permitidos por el aforo, pese a ser temporada alta.
Para los operadores de la región, se trata de una situación insostenible que golpea a miles de emprendedores del sector turismo. La solución a este problema pasa por la venta de la totalidad de entradas a través de plataformas digitales transparentes.
"Solo de esa manera se podrá combatir la situación que se vive actualmente y lograr que Machu Picchu retome el sitial que tenía hasta el 2019, año en el que recibió la visita de más de 1,5 millones de turistas”, refirió ComexPerú.