Se equivocan quienes piensan que las puyas solo crecen en el Parque Nacional Huascarán, pero estas magníficas bromélias también se encuentran en Canchayllo (Jauja, Junín), uno de los rincones naturales de la Reserva Paisajística Nor Yauyos Cochas., Luis Pérez / Revista Rumbos Las casas de abobe quedan atrás. Panorama montañoso. Andar moderado por un senderito zigzagueante. Se alborota el viento. Las nubes grises se agigantan. Adiós cielo azul. Bienvenido presagio de lluvia. Apresurar el paso. El corazón se acelera. Descanso. Respirar profundamente. Volver a la ruta. PUEDES VER: Canchayllo: rumbo al cañón de Shucto Las puyas de Raimondi están diseminadas en un espacio de 70 hectáreas. Foto: Ángel Chávez Ni modo. No serán jugadores de fútbol, pero, igual, tienen que sudar la camiseta entre los 3 200 y los 4 200 m.s.n.m. Es la ley del caminante que quiere llegar a su destino. Es la ley de quienes buscan espacios naturales prodigiosos, donde revolotean los piclafores y se avistan -entre la sorpresa y la fascinación- unas plantas endémicas de hojas espinosas, largas y puntiagudas. “Una de ellas puede albergar más de 6 000 flores y sus hojas son utilizadas como nidos”, revela el guía local Gerónimo Egoavil, en el tramo final de la ruta de tres kilómetros que conduce a un rodal de puyas de Raimondi, la bromelia considerada como la mayor inflorescencia del mundo. La puya de Raimondi puede llegar a medir hasta más de 12 metros. Foto: Ángel Chávez "Canchayllo es la 'Capital de la puya de Raimondi'", saca pecho Gerónimo que ahora cuenta que los picaflores o colibrís son los principales polinizadores de un planta que florece a los 100 años y cuya altura puede superar los 12 metros. “Cuando mueren caen rendidas. Si desean ver algunas, están a la vuelta del cerro”. Los expedicionarios se miran de reojo. Aceptan el reto. Vuelven al camino. El dato Conozca la Reserva Paisajística Nor Yauyos Cochas con los profesionales de Andina Travel Tours. Informes: 984 306 541. Las aves utilizan las hojas espinosas, largas y puntiagudas para formar sus nidos. Foto: Ángel Chávez