Entre Marcapomacocha, al pie de la cordillera La Viuda, y la laguna Chuchón, en el valle del Chillón, se despliega un territorio mágico, que puede ser recorrido a pie o en 4x4.,Noemí Acuña / Revista Rumbos La inmensidad de aquella laguna acompañada de patos andinos, alpacas pastando en sus riberas y de fondo el nevado Misipiñahui, hicieron que el frío que sentía se disipe y que olvidara que mi cabeza estaba a punto de estallar por los 4.300 m.s.n.m. PUEDES VER: Canta: el insospechado bosque de puyas de Raimondi de Jarapampa Aventura y naturaleza en Canta. Foto: Teobaldo Ardiles Era mi primera impresión de Marcapomacocha. Un poblado enclavado en la gélida puna de la provincia de Yauli, en Junín, a cuatro horas de Lima. Su nombre significa pueblo de lagunas y pumas. Estos últimos ya no se ven con facilidad, pero sí posee 42 espejos de agua de color verde, azul o turquesa que enamoran a cualquiera. Que además albergan deliciosas truchas arco iris que llegan a pesar hasta diez kilos. Si bien la razón por la que llegan los visitantes es para disfrutar de la cordillera La Viuda. Lo mejor no son sus nevados sino estas bellas lagunas que se pueden recorrer caminando o en 4x4. Laguna Azulcocha y el nevado La Viuda. Foto: Teobaldo Ardiles En efecto, no es necesario bajarse del vehículo para apreciar un rosario de espléndidas lagunas, como Antacoto, Marcacocha, Runtococha, Yantac, entre otras. Hay dos rutas para su 4x4. La primera: Lima-Casapalca-Marcapomacocha-Yantac-paso La Viuda (4.635 m.s.n.m.) y el retorno a Lima es por Canta; y la segunda: Lima-Casapalca-Marcapomacocha-Carampoma-Santa Eulalia-Lima. Ambas son trochas afirmadas en buen estado y se pueden cubrir en un solo día. Debe llenar el tanque en San Mateo o Casapalca, después ya no hay donde. Granizo en las alturas. Foto: Teobaldo Ardiles Ahora, caminando, es otra cosa. Se sufre más pero el paisaje se mete dentro de los huesos y el alma. Uno se lo lleva puesto. Para empezar es imprescindible dormir en Marcapomacocha, y empezar la jornada a golpe de cinco de la mañana. El aire puro, el cielo celeste y cercano, los rebaños de llamas y alpacas pagan el esfuerzo. Pero son las hermosas lagunas de Azulcocha, Leoncocha, y Vanaulla, teniendo como fondo al nevado La Viuda, que hacen que uno agradezca a Dios por tan notable geografía. La caminata, que toma unas diez horas, culmina en la laguna Chuchón, ya en la cuenca del río Chillón, donde se puede coger un carro hasta Canta. Claro, más prudente es hacer este trekking en dos días, acampando en Azulcocha. Catarata Carispaccha. Foto: Teobaldo Ardiles En Rumbo Cómo llegar: En carro propio: Por la cCarretera Central hasta Casapalca. Desde allí hay un desvío que sube a Marcapomacocha.En movilidad pública: De San Mateo o Casapalca salen autos (entran cinco personas) hacia Marcapomacocha. Otra posibilidad es tomar la movilidad comunal que parte todos los días de Casapalca a las 4.30 p.m. Recomendaciones: Llevar un buen gorro y no quitárselo. El viento fuerte suele originar el mal de altura. Si su cabeza está protegida no tendrá mayores problemas. Lo ideal es aclimatarse un día en el pueblo y comer ligero.