Sociedad

Lobos marinos y aves mueren en playas de Arequipa por gripe aviar

Nuevo pico. En la playa de Punta de Bombón, yace gran cantidad de cuerpos de estos animales. Solo un equipo trabaja en el recojo de las especies para enterrarlas. Falta apoyo de municipalidades.

Lobo marino. En la playa del distrito de Punta de Bombón, uno de gran tamaño fue recogido.  Foto: Rodrigo Talavera/ LR
Lobo marino. En la playa del distrito de Punta de Bombón, uno de gran tamaño fue recogido. Foto: Rodrigo Talavera/ LR

Arequipa. Un fuerte olor a putrefacción se percibe apenas nos acercamos a la playa del distrito de Punta de Bombón en la provincia de Islay. Proviene de los lobos marinos y aves silvestres muertos que yacen sobre la arena, ya en estado de descomposición. Prácticamente a cada paso hay un animal sin vida. Es el virus de la gripe aviar H5N1 que los está infectando y matando en cuestión de días.
Un equipo del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), apoyado por una brigada de la empresa Corporación Rico, se está encargando del recojo de los cadáveres y su posterior entierro en las playas. Su labor es ardua.

El jueves 25 de mayo recogieron 8 lobos marinos y 11 aves infectadas solo en el desembarcadero artesanal El Faro de Matarani, les sacaron muestras y luego procedieron a enterrar los cuerpos en una parte de la tercera playa de Mollendo. Para hacerlo siguieron un protocolo sanitario de Senasa que indica que deben cavar una fosa de dos metros de profundidad. El oleaje anómalo dificultó su labor.

Sobre los cadáveres echan un potente desinfectante y luego entierran los cuerpos. Enseguida enrumbaron hacia Punta de Bombón, localidad que es la más afectada en este momento.

El equipo considera que esta es una tercera ola de la gripe aviar. En noviembre del 2022, cuando el virus llegó al país por las aves migratorias, la población de pelícanos fue la más afectada; a inicios de este año 2023 comenzó a afectar más a las aves silvestres como el piquero y el cormorán guanay. Y desde abril, los lobos marinos chuscos han comenzado a morir en gran cantidad, siendo en este momento la especie más afectada. Hay crías de lobos que salen a la playa en busca de sus madres, mientras ocasionales visitantes, tratan de alimentarlos, sin medir el riesgo.

Según el Senasa, desde noviembre del año pasado hasta marzo de este 2023, se enterraron 152.540 de animales silvestres.

Poco apoyo municipal

Ricardo Madariaga Medina, gerente de Medio Ambiente y de Servicios Públicos de la Municipalidad Provincial de Islay, sostuvo que la comuna ha realizado un cerco epidemiológico para evitar que el virus llegue a las aves de traspatio y que están apoyado en el recojo. Sin embargo, el equipo que recoge los cadáveres sostiene que en general hay muy poco apoyo municipal. La semana pasada, solo realizaron el barrido un día. Cuando solicitan movilidad, les dicen que está malograda.

La más completa inacción está en el distrito de Punta de Bombón, donde no hay respuesta a los pedidos para que presten maquinaria pesada para cavar las fosas, ni apoyo con personal.
Según el artículo 80 de la Ley Orgánica de Municipalidades, son estas las encargadas del saneamiento, salubridad y salud de su población. Sin embargo, no hay ese cumplimiento.

En las playas, donde yacen los cadáveres, se puede observar como los buitres se posan sobre sus presas y los perros devoran los cuerpos. El equipo de recojo sostiene que este es un riesgo, pues luego esos canes transitan hacia la ciudad y podrían llevar el virus a otros animales domésticos o a los mismos seres humanos. Por ello, demandan más apoyo para afrontar este pico del virus.

El funcionario municipal indicó que están difundiendo mediante redes sociales la información respecto a la gripe H5N1.

Hay que precisar que en otras regiones, ya se ha reportado casos positivos en aves domésticas. De acuerdo al Senasa, son 169 casos positivos que fueron controlados. Asimismo, se ha autorizado la aplicación de más de 17 millones de dosis de vacunación contra influenza aviar.

Periodista, estudió en la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) de Arequipa. Lleva 12 años ejerciendo el periodismo. Es reportera de la edición sur de La República desde el 2016.