la ceremonia. Contó con la presencia del rector Marcial Rubio, el presidente Pedro Pablo Kuczynski, el padre Gustavo Gutiérrez, entre otras personalidades.,Cien años de vidas académica. Cien años, no de soledad, sino una centuria de esfuerzo comprometido con el desarrollo del país. La Pontificia Universidad Católica del Perú anoche empezó a celebrar el centenario de su fundación. Y lo hizo con la ceremonia de apertura del año académico en el Polideportivo y contó con la presencia del presidente del Perú, Pedro Pablo Kuczynski, el rector Marcial Rubio, el cardenal Giuseppe Versald, Gran Canciller, y personalidades como el padre Gustavo Gutiérrez.La ceremonia comenzó con el Himno Nacional e himno de la PUCP y luego se dio lectura del decreto supremo con el que se fundó esta casa de estudios. Se recordó al padre Jorge Dintilhac, su fundador, así como al padre Felipe Mac Gregor, rector de la universidad por largos años. Palabras del rectorEl rector Marcial Rubio decantó el rol académico y social de la PUCP. “Está basada en sólidos principios cristianos, en lograr la mejor calidad académica que sepamos dar, en promover los derechos humanos y la justicia social, en identificarnos con el Perú y nuestros compatriotas”, señaló. “Tratamos –agregó– de ser una universidad del Perú y para todo el Perú, sin invadir desde Lima para no acentuar el centralismo”.Explicó que la PUCP es más bien participativa con otras 20 universidades del país. “Nuestro lema es ‘La Red Peruana de Universidades es una universidad tan grande como el Perú’”, definió marcial Rubio.Palabra de maestroEl responsable de ofrecer la “Lección Inaugural” del año académico 2017 fue el padre Gustavo Gutiérrez, promotor de la Teología de la Liberación.El sacerdote, premio Príncipe de Asturias y una de las mentes más lúcidas de nuestro país, recordó su rol de docente en la PUCP para luego señalar también del rol de una universidad. “Hay que responder a la motivación de servicio y al mismo tiempo hay que tener en cuenta la llamada evolución social que impulsan a nuevas tareas y presencias de la universidad en la vida del país”, comentó.En ese sentido, argulló que una universidad debe tener una vocación de servicio.“La tarea no se limita a la formación de nuevos profesionales, lo importante es forjar personas responsables apuntando a la convivencia social basada en la justicia y la sociedad, sobre todo en estos tiempos que nos encontramos abrumados en el país”, dijo.Es decir, invocó a la vocación solidaria. “Queremos –dijo– que se convierta en una ‘universidad en salida’, que sepa adelantarse, tomar la iniciativa sin miedo, salir al encuentro, buscar y llegar a los cruces de los caminos para invitar a los excluidos”.“Una universidad en salida es la que va hacia el otro, y en primer lugar a los excluidos, los invisibles del país que se hacen ver de cuando en cuando. Sobre todo cuando ocurren catástrofes naturales, ellos son las primeras víctimas. Para luego regresar a su estado natural”.Una universidad tiene que estar junto a ellos, “hay que estar de corazón junto al prójimo” concluyó.Para finalizar, el presidente Pedro Pablo Kuczynski dio por abierto el año académico con la siguientes palabras: “La misión de la universidad que ha desarrollado por muchos años La Católica es inculcar conocimiento, ciencia, pero con alma y valores, porque si solo hay conocimiento y no hay valores, ni el corazón que se acerca hacia el otro, entonces no hay realmente una misión cumplida. Le deseo muchos años de vida a la universidad”. ❧ renato pajuelo